Carismático y poco convencional, así es Masayoshi Son, el CEO de SoftBank. Dos aspectos que llaman la atención en el ámbito empresarial de Japón, donde sus altos cargos se caracterizan por una actitud seria y poco abierta.

El fundador de la gigante japonesa de las telecomunicaciones es un visionario apasionado por las nuevas tecnologías. Su objetivo es formar un SoftBank 2.0 y ése es el motivo que justifica los últimos movimientos de la compañía. El más reciente es la adquisición de ARM Holdings, una multinacional británica dedicada a los semiconductores y al desarrollo de software. Se trata de la mayor operación en Reino Unido desde el Brexit. Pero aunque la situación británica ha provocado grandes incertidumbres en los inversores, Masayoshi Son confía en la fortaleza del país:



Sé que mucha gente está preocupada por esta situación complicada, esta situación política en Reino Unido, y muchos de mis amigos tienen negocios allí, y están muy asustados, y quizás algunos de ellos incluso piensan en salir del país para recolocar sus compañías en otros lugares. Yo estoy totalmente en contra. Pienso que éste es el momento en el que tenemos que invertir con mayor compromiso y creo en el futuro de Reino Unido. Creo mucho en Reino Unido.

La adquisición de ARM es una de las más importantes para Son. La compañía británica tiene un papel fundamental en el cambio de la industria a través de dos áreas clave: la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas.

Y es precisamente ese enfoque el que ha llamado la atención del CEO de SoftBank, cuyo objetivo es realizar un cambio paradigmático en la tecnología dentro de su propia empresa. Sobre ARM ha hablado  hoy Masayoshi Son, y esto decía:



ARM tiene muchos ingenieros alrededor del mundo, pero casi la mitad de sus ingenieros están en Reino Unido, y la mayoría en Cambridge. Éste es el ecosistema que ha creado ARM durante muchos años y pienso que es la fórmula ganadora. Por lo que sólo mejoraría la fórmula ganadora en vez de invertir más agresivamente en el ecosistema.

En línea con esa revolución tecnológica, este año ARM adquirió Apical, una compañía británica especializada en la tecnología que permite que los ordenadores analicen imágenes, una técnica en expansión que justifica el fuerte interés de SoftBank por esta compañía.

A parte de la compra de ARM, SoftBank ha realizado importantes movimientos. El pasado mes de junio vendió al gigante chino Tencent Holding su participación mayoritaria en Supercell, el fabricante finlandés de juegos móviles creador de Clash of Clans. También en junio vendió sus acciones en Alibaba por valor de 10.000 millones de dólares, así como su participación en la compañía de videojuegos japonesa Gungho Online Entertainment.