La industria alimentaria se prepara para una batalla entre empresas internacionales. Nestlé, amenazada por varias compañías, lucha por el primer puesto.

Se abren varios frentes en el mercado alimenticio. Por una parte, la creación de la estadounidense Kraft Heinz Co. y, por otra, la sombra europea de Jacobs Douwe Egberts, conocida como la mayor compañía mundial de café. Esto, unido al crecimiento de otras compañías, hace que Nestlé se tambalee. Su presidente, Peter Brabeck – Lemathe ha anunciado que se tomarán varias medidas para mantener su posición.

Las propuestas del CEO de Nestlé tienen lugar tres semanas después de que se haya anunciado la compra de Kraft Foods por parte de H.J Heinz Co., respaldada por Warren Buffet y la firma de capital privado 3G Capital. De esta unión ha surgido la compañía de comida envasada más grande de EEUU.

En primer lugar, Nestlé realizará una aceleración de su política de ajuste de su cartera de actividades, así como un mejor uso del tamaño de la compañía. Ya ha dado pasos hacia ambas metas. Ha vendido las empresas de bajo rendimiento, incluyendo PowerBar y la mayor parte de la compañía de nutrición Jennie Craig. También ha creado un nuevo cargo en la junta ejecutiva para supervisar varias funciones de apoyo empresarial a nivel mundial. La medida busca sacar el máximo partido de la empresa.

Brabeck señala que tanto 3G como Buffet han pulverizado el mercado de la industria alimentaria con las adquisiciones en serie. Los socios de 3G son conocidos por su gran reducción de costos de explotación, lo cual tiene un gran impacto sobre el resto de grupos de la industria.