"La diversidad es un activo, no una carga", asegura Madi Sharma, elegida como Mejor Jefa de Reino Unido. Empresaria, fundadora del Madi Group y británica descendiente de inmigrantes, esta emprendedora tenía muchos factores en contra para fracasar. Nuestro corresponsal en Bruselas, Alexandre Mato, ha mantenido una charla con ella.



P: Estamos con Madi Sharma, empresaria, ciudadana británica, descendiente de inmigrantes, emprendedora con una historia de éxito... Ms Sharma, gracias por atender a los micrófonos de Capital Radio.

R: Gracias. Siempre me ha gustado que se me conozca como Madi, M, A, D, I, porque es mi marca, el acrónimo de Madi Apoya Diferentes Ideas, todo lo que yo hago busco que sea diferente. Hoy dirijo el Madi Group que actualmente son 11 empresas desde compañías del sector privado, donde obtenemos beneficios, o en empresas con finalidad social donde revertimos el beneficio en causas sociales, y también tenemos ONGs o un think-tank donde analizamos en conjunto estas políticas.

P: Vamos a intentar ir paso a paso, si me permite Madi. Lo primero, estas compañías que obtienen beneficio, ¿en qué sectores lo hacen?

R: Dentro del grupo tenemos la filosofía de que no haya reglas, no hay currículums, también tenemos la política de que no haya planes de negocio ni existe una cultura de la culpabilidad, no se deja tirado a nadie. Cualquier error individual es mio.

Pero también tenemos tres principios: no hacemos medicamentos, tampoco defensa, es decir, armas, y tampoco explotamos a la gente. Así que cualquier otra cosa, en cualquier sector, podemos estar. Esa es la parte privada del grupo, trabajar en cualquier área donde se pueda obtener un beneficio excepto en las que he dicho.

P: ¿Y obtienen beneficio, dinero cada año?

R: El beneficio está genial, es una palabra positiva. Si no tienes beneficio no eres sostenible. Así que tenemos que conseguirlo. Lo que hacemos es obtener una comisión de las operaciones empresariales que cerramos. Lo voy a explicar con la primera somosa que vendí, un producto de la cocina india, fue por un euro y las operaciones empresariales en las que trabajamos ahora son por 1.000 millones de euros en inversiones. Así que lo que deben entender es que se trata de añadir ceros.

Nosotros conseguimos unas comisiones y lo que hacemos es utilizarlas en otras compañías para impulsar el cambio que queremos ver.

P: Pero ustedes, ¿están en el negocio del catering o lo que haces es poner en contacto a productores locales con vendedores?

R: No. Lo que estamos es en el negocio de aunar ideas con gente que tiene problemas. Puede ser en cualquier sector. Trabajamos en las tecnologías disruptivas, las que van contra las dominantes, también con la industria alimenticia, en el sector del transporte, el médico. El problema es que muchas veces son inventores pero no emprendedores, no saben cómo vender sus ideas. Lo que hacemos es vender esas ideas o atraer inversión para ellas. Y por ejemplo ahí es donde obtenemos las comisiones.

P: ¿Podemos decir que usted es en cierto modo un business angel?

R: Lo que soy es más bien un broker. El business angel invierte, nosotros no lo solemos hacer, sólo a un pequeño nivel, con pequeñas compañías. Realmente somos el broker que junta las dos partes.

P: Este es hoy en día el Madi Group. Pero, ¿cómo empezó todo?

R: Mi background es... bueno, basicamente me gusta compartir mi historia no para generar simpatía sino para que la gente sepa que todo lo que les enseñan en las escuelas y universidades es necesariamente lo necesita un emprendedor.

Yo no tengo estudios, no tengo conocimientos ni competencias reconocidas. En otras palabras, mi currículum está vacío, pero lo que sí tiene es que soy madre soltera, asiática, mujer... ahora soy mayor pero antes no lo fui. Viví en la pobreza y soy una superviviente de la violencia doméstica. Así que lo tenía todo en contra cuando empecé. Y la cuestión es que emprendí porque no tenía ninguna otra opción, soy un emprendedora por necesidad, tenía que alimentar a mis hijos. Sólo tenía dinero para cuatro productos, que cociné y vendí. Y con el beneficio cociné ocho y los vendí. Y con el beneficio hice 16, y 32 y 64... así hasta que ocho años después estábamos produciendo 10.000 unidades a la semana, distribuyendo a supermercados y aerolíneas, teníamos dos factorías en áreas desfavorecidas y 35 empleados con contratos de larga duración. Recibí el premio a la mujer asiática y el de Mejor Jefe de Reino Unido.

Ese es el valor del emprendimiento y el hecho de que no tuviese nada cuando empecé significa que todo el mundo lo puedo hacer. Pero tambén quiero decir que luego fracasé, perdí todo.

P: ¿Usted quebró?

R: Sí, quebré, de hecho tenía menos dinero que cuando era pobre, lo que es algo raro de decir. Pero, fallar es una curva de aprendizaje. Así que cogí mis cosas y empecé de nuevo en el negocio de la importación/exportación, fui a las escuelas de negocio para explicarles como trabajaba y empecé la educación empresarial porque querían que enseñase como realmente no hacen los emprendedores. No hacemos business plan, ningún emprendedor de éxito en el mundo lo hace. Así que les enseñamos cómo emprender con un folio en blanco. Denme su idea y luego hagamos que funcione, haciendo que sea realidad. Eso es la educación de los negocios.

Después de eso me convertí en conferenciante, daba clases en empresas, trabajé en consultoría, creamos el mediador empresarial que trabajamos ahora, fui elegida para el Consejo Económico y Social de la UE. Y esto es importante porque significa que trabajo en la política, así que todo lo que trabajo en el mundo real, pese a no contar con formación, ahora puedo aplicarlo al mundo de la política real.

P: Ya que está usted hablando del mundo real y de la política, la impresión que tenemos en Europa es que hasta cierto punto los políticos, o algunos de ellos, están intentando o nos llevan al pasado, a los 70s u 80s, en vez de avanzar y ponernos en la evolución del nuevo siglo...

R: El problema es que ahora tenemos la economía colaborativa, o las tecnologías disruptivas, lo que significa que el mundo se está moviendo más rápido que los politicos y las elecciones. Los sistemas solían ser estables. Eso se ha acabado, la estabilidad que solíamos predecir. Como vimos en el referendum del Reino Unido, en sus políticos, incluso en las elecciones en Europa, ya no se pueden predecir porque realmente las mentes de las personas están cambiando muy rápido, porque sus trabajos también lo hacen, sus vidas... y nadie sabe como recuperar esa estabilidad. Ese es el problema y porque está rota el discurso entre los políticos y la sociedad civil.

P: Así que vivimos en un mundo de incertidumbres... ¿Y puede la inmigración ser un factor de estabilidad o desestabilización?

R: Espero que sea un factor de estabilidad, porque lo que vemos es que llegan estas diferencias, así que dejémoslas, valoremos el talento, las ideas y empecemos a trabajar juntos. Porque no podíamos seguir como hasta ahora, el mundo ha cambiado, y el problemas es que en el mundo actual tenemos enormes desigualdades que generan la inestabilidad del mundo, no sólo en términos humanos pero también en el medioambiente, lo vemos con el cambio climático...

Tenemos que tener las soluciones a los problemas y estas van a llegar de las personas y no los políticos. Y aquí es donde el capital humano, que está llegando a través de la inmigración, va a ser muy importante. Porque si miramos al mundo con una mentalidad abierta, se pueden solucionar los problemas. Si lo haces pensando de manera local, entonces, ¿cómo se pueden solucionar los problemas globales?

P: ¿Está su país, Reino Unido, mirando al mundo con los ojos cerrados?

R: Creo que el Reino Unido siguen viviendo como si estuviese en el Imperio, cuando gobernábamos el mundo y conseguíamos lo que queríamos. El Reino Unido va a sobrevivir y la razón es porque está llena de inmigrantes y, de hecho, tenemos uno de los sectores de emprendedores con una mentalidad más abierta y eso mantendrá a flote a Reino Unido.

Como emprendedores, siempre vamos a encontrar oportunidades, superaremos los desafíos y esa creo que es la fortaleza del Reino Unido. Mi opinión es que sigo pensando que estaríamos mejor dentro de la UE, haciendo que fuese mejor, pero Europa también está paralizada en su comunicación y eso es uno de sus desafíos.

P: Madi Sharma, gracias por sus palabras, su ejemplo como emprendedora y empresaria...

R: Gracias, muchas gracias. Simplemente no olviden que la diversidad es un activo no una carga.