Horas antes de que publique resultados, Facebook ya ha lanzado dos nuevas apuestas: una atañe a Instagram; la otra, al sector de los videojuegos. Instagram da el salto al ecommerce. La red social, propiedad de Facebook, ha lanzado una nueva opción que permitirá comprar productos directamente desde la app.

La función está en periodo de prueba. Por el momento, está disponible sólo para usuarios de iOS en EEUU y ofrece productos de 20 marcas, aunque se espera que la oferta aumente en los próximos meses.



¿Cómo funciona? Hasta ahora, la única forma de llevar a un usuario a la opción de compra era mediante un enlace en la biografía del perfil de la marca. Ahora, la nueva función permitirá añadir enlaces dentro de cada post. Es decir, en la fotografía del producto en cuestión. De modo que el usuario podrá dirigirse directamente a la página de pago del artículo a través de la publicación de Instagram.

Para obtener rentabilidad, Instagram utilizará el mismo sistema que tiene ahora para la publicidad. Es decir, ofrecerá a las marcas que sus fotos aparezcan en la página de Explorar de usuarios que no son seguidores. Sin embargo, la red social no obtendrá dinero de las compras.

Pero Instagram no es la única que se lanza al ecommerce. Su propietaria, Facebook, ya está probando una opción parecida mediante chatbots y hace unos meses también conocimos que Pinterest planeaba algo muy parecido.

Del ecommerce pasamos a los videojuegos. Facebook sigue con la idea de atraer al público gamer y con ese objetivo ha lanzado Gameroom. Se trata de una plataforma que reúne juegos móviles, juegos web y títulos exclusivos para PC. Algo parecido a lo que nos ofrecía en su red social pero sin tener que entrar en ella.

Gameroom se instala igual que cualquier programa de ordenador. Por el momento sólo es compatible con Windows 7 y versiones posteriores.

Con este movimiento, Facebook pretende volver a aquellos tiempos en los que sus usuarios entraban a la red social para jugar a las granjas.

Por el momento, la compañía de Zuckerberg no ha dejado claro si Gameroom evolucionará hacia una plataforma de videojuegos más seria, en cuyo caso pasaría a competir con gigantes como Steam, de la desarrolladora Valve,  u Origin, que dominan el sector gamer.

Lo que sí ha dicho es que quiere quedarse con un 30% de los ingresos que los videojuegos generen en su plataforma. El mismo porcentaje que Apple o la desarrolladora de videojuegos Valve retienen en las suyas.