El fabricante de equipos de telecomunicaciones Ericsson ha lanzado hoy un profit warning tras anunciar que su resultado en el tercer trimestre será "significativamente más bajo de lo que esperaba la compañía". Las acciones del fabricante tecnológico se desploman más de un 15% en bolsa, lo que supone su mayor caída en una década, según señala Bloomberg.




Ericsson, que rendirá cuentas el día 21 de octubre, apunta a que se han acelerado las tendencias negativas en la industria vigentes desde el primer semestre, con floja demanda para la banda ancha móvil -sobre todo en mercados con un entorno macroeconómico débil-.


La firma adelanta así que su resultado operativo cayó un 93% entre julio y septiembre hasta los 31 millones de euros y que las ventas fueron de 5.269 millones de euros, un 14 % peor, según un balance preliminar y no auditado.


Ericsson anunció la semana pasada que eliminará 3.000 puestos de trabajo en Suecia, casi una quinta parte de la plantilla en este país escandinavo, una medida que afectará sobre todo al área de producción y que incluirá "reducciones significativas" en las fábricas de Boras y Kumla, las únicas que mantiene allí.