Iberdrola consigue en el primer trimestre del año un beneficio neto de 1.485 millones de euros, gana un 40 % más que en el mismo periodo de 2022. La compañía destaca la mejora de sus resultados en España y Reino Unido, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

El resultado bruto de explotación (ebitda) crece un 38 %, hasta los 4.064 millones de euros, gracias a la recuperación del déficit de la tarifa regulada SVT en Reino Unido, el mejor desempeño en países de la UE por la normalización de la producción, así como por el crecimiento en renovables y redes.

Las inversiones brutas de Iberdrola alcanzaron los 10.400 millones de euros en los últimos doce meses, con más del 90 % asignadas al negocio de Redes (4.800 millones de euros) o a Renovables (4.600 millones de euros), de las cuales el 30 % son en eólica marina y a redes inteligentes -4.800 millones- para acelerar la electrificación y fomentar la autonomía energética.

Mejoran las ventas

La cifra de ventas de la energética se disparó también en este primer trimestre hasta los 15.460,6 millones de euros, frente a los 12.150 millones de euros del mismo periodo de 2022.

Según Iberdrola estos incrementos se producen a pesar del aumento en la partida de impuestos en el periodo, que alcanzó los 591,9 millones de euros, frente a los 311,5 millones de euros a cierre de
marzo de 2022, como consecuencia fundamentalmente del mayor beneficio antes de impuestos, la inclusión del gravamen del 1,2% sobre ventas en España.

Para el conjunto del año 2023, el grupo prevé un crecimiento del beneficio neto de un dígito medio/alto ('mid to high single digit'), sin considerar extraordinarios adicionales.

Iberdrola
Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola, en la junta de accionistas