Lego sigue batiendo sus marcas. Durante la última década, la compañía ha incrementado sus ventas año tras año. Éstas han alcanzado los 4.400 millones de dólares en el último año, según los resultados que ha presentado la empresa. Lego ha declarado que los ingresos anuales han crecido un 13%, convirtiéndose en el líder mundial de los juguetes, por delante de Mattel. Los ingresos netos han crecido un 15% a 1.000 millones de dólares.

Como muestra de su fortaleza, Brand Finance ha situado a la marca como la más poderosa del mundo. La asesoría declara que la elevada puntuación de Lego se debe a su familiaridad, lealtad, promoción y a su reputación corporativa. Lego es un juguete creativo que permite que los niños construyan sus propios mundos, a la vez que mueve la nostalgia de los padres. Eso es lo que hace que la marca sea un éxito.

La compañía obtiene el 60% de sus ventas cada año gracias a sus nuevas colecciones, que han incluido juegos basados en la exitosa película, Lego Movie, que se estrenó en 2014 y ha llegado a recaudar más de 468 millones de dólares.

Ante este gran éxito, Warner no ha tardado en montar una franquicia cinematográfica con estos personajes de juguete. En 2016 se estrenará Ninjago y, en 2017, The Lego Batman Movie. No será hasta 2018 que podamos disfrutar de la segunda parte de la Lego Movie, que cobrará vida de la mano de Rob Schrab, su nuevo director.

Pero Lego no sólo se expande a otros mercados, también a otros continentes. La empresa, que tiene su principal mercado en Estados Unidos, dirige ahora la mirada hacia China. Lego pretende llegar al mercado asiático y abrir allí una fábrica en 2017, el mismo año en el que Euromonitor espera que Asia se convierta en el mayor mercado juguetero del mundo.

Seguro que también allí sus grandes estrellas Lego City, Lego Star Wars y Lego Friends serán el juguete favorito de los niños. Ahora, la empresa está preparando un nuevo producto, Lego Elves, un juego de chicas elfo que probablemente gustará mucho al público femenino. A pesar de ello, Lego evita el marketing de género, puesto que la empresa piensa que si se dirige a niños y niñas por igual puede obtener mayor beneficio dado que maximiza el tamaño de su público objetivo.