Un consorcio de cinco empresas petroleras lideradas por Repsol invertirá 900 millones de dólares en la exploración y explotación de un nuevo bloque gasístico en un enclave al sur de Bolivia denominado Iñiguazu.


El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Oscar Barriga, ha firmado un compromiso de inversión con los representantes del consorcio que, además de Repsol, está integrado por la anglo-holandesa Shell, la anglo-argentina PAE y dos subsidiarias de la petrolera estatal de Bolivia.


El documento se firmó en un evento en Santa Cruz  al que asistieron el presidente del país, Evo Morales; el presidente de Repsol, Antonio Brufau, y los ministros bolivianos de Exteriores y de Hidrocarburos.


En el evento se anunciaron los términos del contrato de servicios bajo el cual se desarrollará la operación del bloque Iñiguazu, que cuenta con una extensión de 644 kilómetros cuadrados.


El área tiene un potencial de tres billones de pies de cúbicos de gas y si la exploración tiene éxito, aportará una renta al Estado de 6.000 millones de dólares en los próximos años.


YPFB también ha firmado compromisos de inversión con la brasileña Petrobras y YPFB Chaco para la exploración y explotación de gas en las áreas San Telmo Norte y Astillero.


En San Telmo, el compromiso de inversión asciende a 200 millones de dólares y se calcula que tendrá una producción de 10 millones de metros cúbicos diarios de gas.


En Astillero se proyecta invertir 489 millones de dólares y alcanzar una producción de 4,6 millones de metros cúbicos diarios de gas.