El regulador del estado de Connecticut ha rechazado su propuesta de compra de la eléctrica UIL. Las autoridades tienen dudas sobre la fortaleza financiera y el servicio de la compañía resultante. Dicen que no han demostrado que vayan a proporcionar un servicio seguro, adecuado y fiable. Argumentan que no está clara la estructura, las operaciones y la dirección de la nueva compañía resultante. “El historial de Iberdrola de fusiones y escisiones en la zona se mezcla y no ofrece una imagen consistente de un compromiso fuerte, resistente y dedicado a la distribución local de gas y electricidad”, apunta la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos.

Iberdrola hará todo lo posible para que su operación de compra de UIL salga adelante en Estados Unidos.

Fuentes de la eléctrica han apuntado a Capital Radio que ya están estudiando los argumentos del regulador del estado de Connecticut en contra de la operación y están trabajando en las mejoras para atender a sus inquietudes. Unas mejoras que tendrán que presentar en los próximos días porque la decisión final se producirá el próximo 17 de julio. No es un revés definitivo y no contemplan que la compra pueda frustrarse,  ya que cuentan con la autorización a nivel federal. Diego Jiménez Albarracín, responsable de renta variable de Deutsche Bank, destaca también ese hecho y añade otros más para que la operación siga adelante:



 

El objetivo inicial de Iberdrola es fusionar UIL con su filial estadounidense y que la operación concluya a finales de diciembre con la salida a bolsa en Nueva York. Iberdrola anunció la compra de UIL el pasado febrero por unos 3.000 millones de dólares.

La próxima fecha clave es el próximo 17 de julio cuando el estado de Connecticut emita su decisión final.