La guerra del 5G sale tan cara que, por raro que parezca, la unión con los enemigos hace la fuerza. Esta vez ha sido MásMóvil el que ha estrechado lazos con su rival Orange.

Ambas rivales han firmado un acuerdo para que MásMóvil pueda usar sus redes 5G a partir de 2020 y hasta 2028, aunque el acuerdo es prorrogable otros 5 años. Y la compañía española asegura que hacer migas con su enemigo le va a dar buena cobertura a sus cuentas.

Con este nuevo acuerdo MásMóvil dicen que ahorrarán 40 millones de euros anuales y que su EBITDA aumentará un 3,3% en 2019 y entre un 7,5% y un 9% para 2020. Incluso, aseguran que el alcance de su red de fibra óptica va a aumentar hasta las 14,2 millones de unidades inmobiliarias para finales de 2020 sin tener que hacer muchas más inversiones.

Lo curioso es que se está poniendo de moda en el sector eso de aliarse con sus rivales para pagar la factura del 5G. De hecho, ahí está la clave. Porque invertir en 5G es muy caro: no todas las compañías tienen los recursos suficientes y los conocimientos para poder implementarla. Y las empresas del sector de las telecomunicaciones, precisamente , no tienen el músculo suficiente para hacer frente a esas grandes inversiones ellas solas: les está costando mucho rentabilizar el negocio teniendo en cuenta que la fuerte competencia está obligándoles a sacar ofertas muy jugosas para los clientes pero poco rentables para ellas, para las empresas.

Por eso las big four, las cuatro operadoras más grandes de España, ya están aliándose: la última ha sido la de MásMóvil con Orange, el cuarto y el segundo operador más grande del país. Pero en abril ya fueron Orange y Vodafone, este último es el tercero en ese ranking.

Y ¿qué pasa con el primero, con Telefónica? La clave es que es de las más endeudadas y todavía es la única que no ha anunciado de forma oficial ningún tipo de acuerdo con otra operadora para facilitar el despliegue del 5G. Es decir, que todavía no ha dado el primer paso para ahorrar con el lanzamiento de esta tecnología.

Pero en el mercado ya corre un rumor: que Telefónica podría estar en conversaciones con Orange y Vodafone para sumarse a ese acuerdo del mes de abril. Pero la compañía de Pallete no se moja y ni confirma ni desmiente esas negociaciones.

Eso sí, como no lo haga y tenga que hacer frente a esa inversión ella sola tendrá una ventaja competitiva frente a los otros tres porque podrá desarrollar la tecnología sin depender de nadie, "haciendo lo que ella quiera" pero al final se beneficiará de lo mismo que el resto habiendo pagado mucho más y habiendo empeorado todavía más su apalancamiento.

Por eso los expertos advierten: inversores, estén pendientes, porque en el mercado ya suenan campanas de boda de Telefónica con otros operadores para luchar juntos contra la factura del 5G.