UBS mejora sus ganancias netas un 11% en el cuarto trimestre del año, impulsado por la mejora fiscal, que compensa la caída en la gestión de patrimonios y el resultado en la banca de inversión. Así, los ingresos netos en el último tramo del año ascienden a 949 francos suizos (932 millones de dólares). Este resultado bate las previsiones de 911 millones de francos y lleva a UBS a proponer un dividendo en 2015 de 85 céntimos por acción, frente a los 75 de 2014.

El ratio de capital Tier 1 del banco se mantiene en diciembre en el 14,5%. Sin embargo, el beneficio antes de impuestos del negocio de banca privada se reduce un 47%, hasta 344 millones de francos. Las ganancias de la banca de inversión se desploman un 63%, hasta 80 millones.

UBS se encuentra en un proceso de reestructuración, para centrarse en la reducción de patrimonio y adelgazar la banca de inversión. El consejero delegado de la entidad, Sergio Ermottti, explica que los bajos tipos de interés y las crecientes exigencias regulatorias sobre el capital obstaculizan la capacidad del banco para aumentar las ganancias y aumentan las preocupaciones de los inversores.

El cuarto trimestre del año se caracteriza por niveles muy bajos de actividad y un aumento de la aversión al riesgo, según informa UBS. El rendimiento negativo y la volatilidad del mercado en el comienzo de 2016, unido a los bajos tipos de interés y la fuerza del franco suizo continúan presentando vientos en contra para la actividad de la entidad.