Hong Kong es la ciudad más accesible para un millennial. Y sí, se trata de una de las ciudades más caras del mundo, pero allí los productos ‘básicos’ para los millennials son más baratos. Hablamos de “esenciales” como Netflix, un iPhone, un portátil, unos pantalones vaqueros, unas sneakers, un café, un Big Mac y aguacates.

En Hong Kong, comprar todos esos productos nos costaría 1.800 dólares, mientras que en Buenos Aires se duplica la factura a casi 3.700 dólares.

Son datos que arroja UBS en su nuevo informe sobre el coste de la vida en 77 ciudades del mundo. Datos que indican que Zúrich es la ciudad más cara del mundo por delante de Ginebra y Oslo, aunque también se trata de la ciudad con el mayor salario medio: 5.764 dólares. En el informe aparecen dos ciudades españolas, Barcelona y Madrid, que quedan a mitad de tabla: en los puestos 34 y 36.

Teniendo en cuenta que Zúrich tiene el mayor salario medio del mundo, allí sus ciudadanos pueden comprarse un iPhone X en menos de 5 días de trabajo. En Lagos, por ejemplo, tendríamos que trabajar más de 130 días para poder permitirnos el último smartphone de Apple, ya que allí el salario medio ronda los 250 dólares.

Para salir un viernes noche en pareja, las ciudades más asequibles son Praga, México o Rio de Janeiro. Allí podemos salir a cenar con un buen vino y ver el último éxito de taquilla por menos de 100 dólares. Mientras que en Tokio, Nueva York y Estocolmo el precio se duplica. Los precios de las entradas de cine en las tres ciudades rondan los 16 dólares y una botella en Tokio, por ejemplo, se nos va a 60 dólares. Así que una cena completa en pareja con cine puede costar perfectamente 200 dólares.

Una tarde de café con amigos saldría especialmente barato en Lagos, Lisboa y Roma, donde un café cuesta menos de un dólar. En Doha y en Copenhague, todo lo contrario: cuesta más de 6 dólares. Madrid estaría en la parte baja de la tabla: en la capital española un café ronda los dos euros.