El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, asegura que es "un roble viejo" con energía para seguir al frente de la compañía, tras su reelección como máximo ejecutivo por un mandato más -hasta 2023-, pero subraya que el grupo cuenta con planes de sucesión definidos a todos los niveles, "incluido por supuesto el presidente".

A la pregunta de un accionista sobre si el grupo cuenta con un plan para el relevo del máximo ejecutivo, Galán afirmó que en Iberdrola hay "retoños" para esa sucesión. "Está perfectamente definido y los sistemas y planes de sucesión están definidos a todos los niveles de la compañía, incluido por supuesto el presidente", dice.

En otros asuntos que se han tratado en la Junta de Accionistas, Galán, asegura que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima del Gobierno es "ambicioso" en sus objetivos a 2030. Dice que el plan diseñado por Teresa Ribera para la próxima década puede proporcionar a España "una posición privilegiada" para abordar la transición energética.