El Ibex arranca la semana en negativo y se aleja los 9.500 puntos recuperados la semana pasada. Cierra con caídas del 0,76% hasta los 9.437 puntos, a la espera de cualquier novedad respecto de la retirada del Reino Unido de la UE antes del próximo 12 de abril.

Los inversores recogen beneficios después de la subida de casi un 3 % de la semana anterior, en un clima en el que persiste la incertidumbre sobre cómo terminará el "brexit" y con el precio del petróleo en carrera alcista, hasta niveles del pasado noviembre.

Descensos en España, también en Europa y en EEUU. Javier Molina de eToro explica que el comportamiento del mercado americano va a depender de lo que haga el sector tecnológico y financiero.

Análisis de Wall Street con eToro

En España, AENA ha sido uno de los valores más expuestos a la región, como AENA, es uno de los más perjudicados tras un recorte en la recomendación de los analistas de RBC. Rebaja AENA desde 'neutral' a 'infraponderar' y recorta su precio objetivo desde los 155 euros por acción a los 145.

RBC recuerda que el 20% del tráfico aéreo de los aeropuertos gestionados por Aena depende del resultado final del Brexit. Además la compañía se enfrente a la incertidumbre por el resultado electoral de los comicios del 28 de abril. La compañía celebra mañana Junta General de Accionistas, por lo que podría despejar algunas dudas sobre estos temas.

Todos los grandes valores han perdido posiciones, los más castigados han sido Telefónica, que cedeo un 1,17 %; Iberdrola, un 0,48 %; Repsol, un 0,42 %; e Inditex, un 0,37 %.

****OTROS PROTAGONISTAS

-SACYR

Vende casi la mitad del capital de la cartera de siete concesiones que tiene en explotación en Chile por un importe de 440 millones de euros que incluye la deuda asociada. Con esta operación, la compañía se suma así a otras constructoras cotizadas del sector que han realizado operaciones similares de apertura de sus negocios a socios, como son FCC con la venta del 49% de Aqualia y Acciona con una cartera de parques eólicos internacionales.

-TALGO

Se adjudica un contrato en Egipto por 158 millones de euros para fabricar y mantener 6 trenes con capacidad para cerca de 500 pasajeros. El proyecto contempla el mantenimiento de los trenes durante 8 años por 32 millones de euros.