La Audiencia Nacional ha dictado un Auto que acuerda continuar tramitando las diligencias previas porque el juez sostiene, entre otras cosas, que se ocultaron datos al auditor de las cuentas de la entidad.

Ha finalizado la instrucción, tenemos ya el auto de transformación de las diligencias en procedimiento abreviado donde se habla de delitos de falseamiento de cuentas anuales u otros documentos que deban reflejar la situación de la sociedad, apropiación indebida o administración desleal y falsedad en documento mercantil.

En la resolución se señala que los estados financieros de la Caja de Ahorros del Mediterráneo de 2010 y primer semestre de 2011 "no reflejaban la imagen fiel de la entidad" sobre todo a consecuencia de la liberación de provisiones ligadas a préstamos titulizados, por lo que "el resultado contable del ejercicio 2010 debería haber sido menor en 210.341.000 euros"

Presume que los balances de 2011 estaban falseados ya que no reflejaban la situación crítica de la sociedad sino que ofrecían una imagen distorsionada, aparentando beneficios de aproximadamente 60 millones de euros cuando en realidad había pérdidas por importe de 1.136 millones de euros.

El Auto considera además que los miembros del Comité de Dirección de la CAM cobraron indebidamente 47.307.200 euros por diversos conceptos retributivos como indemnizaciones, complementos variables salariales e intereses relativos al exceso de prima pagada a la aseguradora Caser.

El juez habla de plan concertado por dicho Comité de Dirección en aquellos años con la finalidad de integrarse en el SIP y fusionarse en otras cajas de ahorro para diluir el estado de la CAM y cobrar los incentivos por resultados y otros complementos ligados a la buena marcha de la entidad.

Para finalizar, otorga diez días a la Fiscalía y a la acusación particular para que formulen escrito de acusación solicitando la apertura de juicio oral o el sobreseimiento.

Vamos, que el papel soporta todo pero la Justicia no.

Arcadio García Montoro. Abogado