Caixabank logra un beneficio de 1.047 millones de euros, con un cuarto trimestre que se vio impactado por las nuevas dotaciones para hacer frente a las cláusulas suelo. En el último tramo de 2016, el beneficio de la entidad cayó un 77% (en el conjunto del año creció un 28,6%). La tasa de mora baja dos décimas hasta el 6,9%.

La caída del beneficio neto atribuido en el último trimestre se debe a las dotaciones extraordinarias que la entidad realizó para hacer frente a la devolución de las cláusulas suelo. Con esos 110 millones que provisionó a finales del pasado año, la entidad acumula dotaciones en este sentido por 625 millones de euros.

Por otra parte, la estimación de la cobertura para insolvencias reduce la necesidad de provisiones de la cartera crediticia en 676 millones de euros, mientras que la aplicación de la Circular del Banco de España ha obligado a la entidad a realizar dotaciones por 656 millones en la cartera de adjudicados disponibles para la venta.

Por su parte, el margen de intereses disminuye un 4,5% en 2016, hasta los 4.157 millones de euros, y los ingresos por comisiones se sitúan en los 2.090 millones, un 1,2% menos que el ejercicio anterior.


Los ingresos de la cartera de participadas se sitúan en los 828 millones, un 43,3% más, impactados, entre otros factores, por los mayores ingresos de Repsol y la menor contribución de The Bank of East Asia e Inbursa.


El número de clientes creció un 2,5% respecto a 2015, con una caída en el crédito del -0,8%.