En un momento complicado en el mercado de deuda con un repunte significativo en las primas de riesgo (la española ha subido hasta 150 puntos básicos) el Tesoro español ha colocado 3.200 millones de euros en bonos y obligaciones. La cifra es algo inferior al objetivo máximo previsto y que era de 3.500 millones de euros, algo que no sucedía desde hace tiempo.

En el caso de los activos con vencimiento en 2024 ha tenido que elevar el tipo de interés medio hasta el 2,19%  desde el 2,07% de la subasta anterior. Sin embargo, en las obligaciones a 15 años, el tipo medio ha continuado reduciéndose: hasta el 2,84% desde el 3,51 de la subasta anterior.

La tasa de cobertura ha repuntado en los bonos a 10 años y lo contrario ha sucedido en los activos a 15 años.