El 40% de los hogares estadounidenses  tienen servicio de vídeo en streaming. Sin embargo el número de personas que ven sus contenidos son un misterio para las compañías audiovisuales. Un misterio hasta  el próximo mes.

Nielsen, la compañía de medición ha decidido sacar a la luz la audiencia de los programas y películas de las compañías Netflix y Amazon,  para ayudar a los propietarios de las licencias para medir el impacto que tienen más allá de los medios tradicionales.

Lo analizarán a través del audio. Con los diferentes sonidos que el programa emita, identificarán la serie o la película que se está reproduciendo en streaming. Este sistema, tal y como apuntan desde Nielsen, aun no es aplicable al servicio online de los  dispositivos móviles.

Las grandes compañías de televisión, venden las licencias de los programas o películas a servicios en streaming. Pero esta venta dentro de la misma empresa preocupa, porque lo que actualmente les aporta grandes beneficios, a largo plazo les puede pasar factura porque les  dan todas las herramientas a los servicios en streaming para que los espectadores se pasen a la televisión a través de Internet.

Todo ello,  en un momento en el que la televisión tradicional baja en audiencia un 7% tal y como apunta Nielsen

Reed Hastings Consejero Delegado de Netflix, apuntaba hace algo menos de un mes el aumento de suscriptores en el último trimestre. En concreto, tuvieron 3 millones de suscriptores en el tercer cuarto. Un millón por mes.

Gracias a la opacidad en los datos de audiencia online, los servicios en streaming como Netflix, tenían grandes ventajas a la hora de negociar la renovación de contenidos con las grandes compañías audiovisuales. Estas últimas negocian a ciegas ya que no conocen el impacto que tienen sus contenidos.

Una de las consecuencias que estos nuevos datos podrían traer, es el cambio en la dinámica de las negociaciones entre las compañías de streaming y los estudios de televisión