No todas las empresas están obligadas a realizar una auditoría, pero siempre es un proceso muy necesario incluso en el caso de que no deba realizarse. En el caso de la auditoría de cuentas, posibilita tener un mayor control sobre toda la gestión financiera. Despojar a este tipo de proceso de todo tipo de connotación negativa es el punto de partida para que tu empresa pueda seguir creciendo, ya que una auditoría proporciona siempre información útil que debemos aprovechar. Una Empresa de auditoría como Legalnet realiza este proceso de forma transparente y objetiva, consiguiendo proporcionar datos de un valor incalculable. Es evidente que una auditoría, ya sea de cuentas o de otras características siempre es un acto que tiene como fin la mejora.

Auditoría, ¿interna o externa?

A la hora de realizar una auditoría, es la propia empresa la que puede efectuar ese proceso. Es lo que se denomina auditoría interna. Sin embargo, realizar una auditoría externa es poner todos los datos en manos de una empresa ajena a la que se está auditando, lo que permite tomar toda esa información en perspectiva y no verse contaminado por datos subjetivos. Legalnet cuenta con una amplia experiencia a la hora de realizar cualquier tipo de auditoría, ya que sus profesionales están debidamente formados para tomar todos esos datos y ponerlos a disposición de la empresa, con lo cual podrá tomar muchas decisiones interesantes y acertadas. Desde realizar un giro en las futuras inversiones, efectuar ajustes en algunos departamentos, o bien, informar a inversores y accionistas de cómo se encuentran las cuentas en ese momento.

Las auditorías externas evitan toda posibilidad de no tratar los datos de forma objetiva, por lo que siempre es un proceso más que recomendable. De esta manera, la información será fidedigna, totalmente analítica y transparente. Por ese razón, siempre es recomendable la realización de una auditoría por parte de una empresa externa como Legalnet, que pondrá todo su conocimiento al servicio de tu compañía en todo momento. Por ejemplo, los datos que se obtienen en la auditoría, determinan cuáles son aquellas debilidades de una compañía, también sus puntos fuertes, pero es evidente que si tenemos conciencia de cuáles son los departamentos o acciones a reforzar, estaremos haciendo una gran labor empresarial.

La auditoría como hecho preventivo y corrector

Tal y como como hemos comentado, la legislación española no obliga a todas las empresas a realizar, auditorías, solamente aquellas que alcanzan unos objetivos de facturación o de número de empleados. Pero es evidente que la importancia de una auditoría va más allá de estos requisitos, ya que es un instrumento de análisis que tenemos a nuestra disposición.

Gracias a los datos obtenidos en una auditoría, es posible tomar decisiones que pueden hacer variar el rumbo de la empresa. Quizás no estemos viendo que esta no lleva un buen camino, y cuando queramos dar un golpe de timón, ya sea demasiado tarde. Las auditorías proporcionan unos datos objetivos que, debidamente analizados, servirán al equipo gestor a tomar las decisiones oportunas para la buena marcha de la empresa. De la misma manera, una auditoría siempre es un instrumento de total transparencia para con los inversores y accionistas.

En el caso de que tu compañía esté obligada a realizar una auditoría, este propio ejercicio posibilita evitar sanciones y multas, ya que ese carácter de obligatoriedad debe cumplirse en determinados plazos. Cuando una auditoría de cuentas no se presenta en el momento que marca la legislación, la sanción es inevitable y no es precisamente de poca cuantía. ¿Merece la pena correr ese tipo de riesgos?

Cuanto mayores sean los datos que una empresa proporcione a la que se encargue de realizar la auditoría, mayores posibilidades, habrá de éxito. Cualquier tipo de parámetro posibilita obtener muchísima información útil y permitirá tomar las decisiones más adecuadas en todo momento. Cuando una empresa no es auditada y el rumbo que ha tomado no es el adecuado, más pronto que tarde habrá que echar el cierre o realizar ajustes en la plantilla. No solamente nos encontramos ante una empresa débil, sino que está proporcionando una pobre imagen al resto de inversores, accionistas y a los clientes.

Por todo esto, la realización de una auditoría por parte de una empresa externa, como Legalnet supone tener un punto de partida de la situación de la empresa en un momento dado, y saber cómo son los siguientes pasos a dar. Las auditorías siempre son positivas, ya que la información que se consigue en ellas tiene un valor muy alto. La diferencia entre auditar o no una empresa puede significar la diferencia entre tener que echar el cierre o bien, realizar unos ajustes y aumentar la facturación. Las auditorías son un mecanismo necesario que, bien realizadas por empresas externas, ayudan a una mejor gestión y una adecuada toma de decisiones.