La mejora gradual de sus resultados en España y la fortaleza de Brasil, junto con la resistencia de sus negocios en el Reino Unido, permitieron al Banco Santander mejorar un 18% su beneficio neto en 2018, hasta 7.810 millones de euros, aumentando sus niveles de solvencia y cumpliendo los objetivos de su plan estratégico a tres años.

Entre octubre y diciembre el grupo consiguió un beneficio neto de 2.068 millones de euros, por encima de los algo más de 1.900 millones previstos de media por analistas.

Como el resto del sector, la entidad encuentra dificulta para mejorar los márgenes en un entorno de políticas monetarias ultraexpansivas. El margen de interés apenas mejora un 0,1% en 2018, hasta 34.341 millones de euros. El mismo porcentaje crece el margen bruto, hasta 48.424 millones.

Aunque la mayor entidad financiera de la eurozona pelea con un persistente y prolongado contexto de tipos de interés ultrabajos, ha conseguido sacar partido a una diversificación geográfica que actualmente tiene en Brasil su principal aliado.

Durante 2018, Europa contribuyó un 52% al resultado del Grupo y América, un 48%. Brasil fue el país que más aportó a los resultados, con un 26% del beneficio ordinario, seguido de España, con un 17%, y el Reino Unido y Santander Consumer Finance (SCF), con un 13% en ambos casos.

En un momento en que los reguladores demandan a los bancos más capital, Santander logró elevar su ratio de capital 'CET1 fully loaded', dato muy vigilado que mide la fortaleza del banco, hasta el 11,3% apoyado parcialmente por la venta del negocio de crédito de Wizink. El banco había proyectado superar el 11% en el ejercicio, algo que ya consiguió en el tercer trimestre.

Por el lado de la rentabilidad, el ROE o rentabilidad sobre fondos propios asciende al 8,21% desde el 7,14% del año anterior.

La tasa de mora del Grupo, una de las más bajas entre las entidades españolas, se sitúa ahora en el 3,73%, con una caída de 35 puntos básicos respecto al 31 de diciembre de 2017.

La presidenta del banco, Ana Botín, confirma que en abril se conocerá el nuevo Plan Estratégico de la entidad.

En España, el beneficio atribuido se situó en 1.458 millones de euros, un 28% más, impulsado por los ingresos derivados de la integración de Popular. La nueva producción de crédito a pymes aumentó un 17% y un 30% en banca privada.