Un grupo de investigadores en Viena ha publicado un estudio que asegura que, mientras las economías del norte de Europa apoyan en mayor medida a los grupos de rentas bajas, en los países del sur de Europa, el gasto social sirve en gran parte para asegurar los ingresos de las rentas más altas.

Los datos han sido recogidos por científicos de la Academia Austríaca de Ciencias (ÖAW), la Universidad Tecnológica de Viena y el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea.

En concreto, destaca como en Portugal, España o Italia se observa como hay "pensiones muy generosas" y que el Estado hace relativamente poco por apoyar a los hogares de rentas bajas.

Un aspecto preocupante y estrechamente ligado al riesgo de pobreza, donde los países que presentan un papel del Estado en la previsión para la vejez de las personas con ingresos elevados limitado salen mejor parados.

Los países del norte de Europa apoyan más a las rentas bajas

Las políticas estatales de redistribución de la riqueza han sido toda una sorpresa para este grupo de investigadores. Si bien se observa como el sur se caracteriza por el elevado pago de pensiones a las rentas más altas, en países como Dinamarca o Países Bajos, los hogares de rentas más bajas son los que más se benefician del gasto social y la redistribución de la riqueza por parte del Estado.

Además, el estudio refleja que "prácticamente no hay redistribución neta hacia los hogares de rentas más altas".