Desde las seis de la mañana y durante 24 horas los taxistas de todo el país están llamados a una huelga en protesta por las nuevas concesiones de licencias de vehículos de alquiler con conductor o VTC para empresas como Cabify y Uber.

Las asociaciones de taxistas esperan una amplia respuesta, cercana al 100%, aunque continuarán los servicios en hospitales, urgencias, aeropuertos y estaciones. Además, a las 11:00 horas han convocado en Madrid una manifestación que podría congregar a más de 20.000 personas en una marcha que comenzará en Atocha y concluirá en la Plaza de Neptuno.

La legislación vigente contempla la existencia de una licencia de VTC por cada 30 licencias de taxi. Los taxistas argumentan que ese ratio se ha vulnerado. Aunque recientemente el Tribunal Supremo anunciara una sentencia que implicará 80 nuevas concesiones de licencias VTC, el sector del taxi considera que en los próximos meses podrían circular 10.000 coches más con pegatina VTC. Reclaman un mayor control sobre esta actividad y se quejan de que sus precios más bajos rompen el mercado o les acusan de elusión fiscal, falta de seguridad e intrusismo.

Al mismo tiempo, defienden el bloqueo de nuevas licencias de taxi por parte de los ayuntamientos para evitar que se devalúen las suyas. Como consecuencia, desde hace más de 20 años el número de licencias de taxi permanece prácticamente invariable en las 70.000 en todo el territorio nacional. Incluso, según el Instituto Nacional de Estadística, el número de licencias disminuyó ligeramente en el último año, al pasar de 70.084 a 69.972. Es la primera vez que bajan de las 70.000 en 20 años.

Por su parte, Uber y Cabify están satisfechos con la decisión del Supremo y explican que la sentencia favorece el derecho de los ciudadanos a elegir entre diferentes alternativas de movilidad. Los conductores de Uber han decidido, por razones de seguridad, no conectarse hoy a los usuarios en el área de la manifestación en Madrid y las calles aledañas mientras dure la protesta, tras los incidentes de anteriores manifestaciones, aunque funcionarán con normalidad en el resto de la capital durante la jornada. Cabify operará con restricciones y no en todas las franjas horarias.

Mientras, el Ministerio de Fomento intenta calmar los ánimos en el gremio con la promesa de aprobar un nuevo Real Decreto que regule la actividad VTC.