"En un año es imposible que un banco pase de valer 180 euros a valer cero". Es la reflexión que realiza Carlos Ladero, director comercial de GPM International Capital, sobre la sentencia de la salida a bolsa de Bankia. "Para mi la estafa está en sacar algo a cotizar que no valía lo que valía", explica, por eso considera que la responsabilidad recae sobre los auditories, "que dieron por válido ese precio".

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"La estafa de Bankia está en sacarlo a Bolsa sin valer lo que valía, la culpa es de los auditores"

"La clave de la sentencia no está en personalizarlo en directivos", explica Ladero. El experto recuerda que para sacar a una empresa a bolsa se deben pasar ciertos trámites. Primero tiene que pasar por el regulador, "tiene que haber una parte formal que se cumpla".

Además, recuerda que tiene que haber una auditoría y "ese año había auditorías trimestrales donde mantenían que todo lo que se estaba poniendo sobre el papel era correcto, que el ladrillo valía lo que valía y que no había aparentemente problema". Por eso, insiste: "la culpa la tiene el auditor, es el que tenía que valorar cuánto valía Bankia en esa salida".

Ladero no olvida que en la salida a bolsa de Bankia se "separó la parte buena del banco de la mala" y que la entidad resultante "no era una creación de algo espontáneo que era más difícil de valorar, llevaba muchos años funcionando".

Por eso, opina que "en un año es imposible que un banco pase de valer unos 180 euros por acción a valer cero", "y que todo eso se lo cuelen a todo el mundo", lamenta. "Para mi la estada está en sacar algo a cotizar que no valía lo que valía y esa culpa no la tienen los directivos ni los reguladores, sino el auditor que dio por válido ese precio", concluye.