El ministerio de Defensa de Corea del Sur confirma que dos de sus aviones de combate han sobrevolado la península junto con cazas de los EEUU.

Es la respuesta conjunta al último ensayo con misiles por parte de Corea del Norte. Pyonyang ya ha acusado a Washington de querer desatar una guerra nuclear con estas acciones. Una fuente del Gobierno surcoreano ha confirmado, por su parte, a la agencia local Yonhap que dos B-1B arribaron a la zona mencionada acompañados por cazas F-15K en torno a las 10.30 hora local (01.30 GMT) del lunes.

Según la agencia estatal norcoreana KCNA, el líder del país, Kim Jong-un, observó una vez más el lanzamiento de un "cohete balístico de precisión guiado y capaz de hacer ataques de ultra precisión". El texto también asegura que el ensayo sirvió para "verificar la estabilidad en vuelo" y el sistema de guiado del proyectil en la "fase de reentrada". También ha destacado el éxito del lanzamiento y que recorrió unos 400 kilómetros antes de caer.

Corea del Sur y EEUU tomaron la decisión de desplegar las naves de combate apenas dos horas después del ensayo norcoreano. El presidente de EEUU, Donald Trump considera este lanzamiento como una gran falta de respeto a China.

El ensayo de misiles del lunes es el noveno de Pyongyang en lo que va de año y el tercero en apenas tres semanas. Los insistentes ensayos armamentísticos de Corea del Norte han llevado a un aumento de la tensión en la región y a una escalada verbal con el Gobierno del presidente estadounidense Donald Trump, que ha llegado a insinuar que estudia posibles ataques preventivos.