La Guardia Civil ha lanzado una alerta de seguridad sobre los robots aspiradores. Se hace eco de un informe de la Oficina de Seguridad del Internauta de INCIBE creada para evitar y resolver los problemas de seguridad que pueden existir al navegar por Internet.

Pues bien, para informar al ciudadano de sus funciones, la Guardia Civil ha lanzado un "tuit" en el que advierten de lo que se debe hacer cuando se adquiere un robót de este tipo. Textualmente indica que "Lo 1º que hay que considerar son las condiciones de privacidad y seguridad. Una buena práctica es conectar estos dispositivos solamente cuando los necesitemos".

 



 

La oficina de seguridad del internauta asegura que los últimos modelos de robots de limpieza inteligentes, no solo se encargan de las tareas de limpieza de forma autónoma, sino que:

  1. Son capaces de recoger planos de la casa para optimizar sus desplazamientos. De este modo pueden llevar a cabo sus tareas de una forma sencilla, sin obstáculos y reportando al consumidor un ahorro económico.

  2. Pueden realizar tareas de videovigilancia. Incluyen sensores de localización visual o cámaras capaces de capturar fotos, emitir imágenes en vivo, así como detectar movimientos. Esta función permite tener una visión remota en tiempo real de nuestra casa a partir de una emisión en vivo.

  3. Son capaces de responder a comandos de voz. Podemos interactuar con el dispositivo utilizando únicamente nuestra voz.


Todas estas ventajas tienen a su vez una serie de inconvenientes. Al ser un dispositivo que recoge y comparte tal cantidad de datos, es normal preguntarse ¿qué hacen con toda esta información? Es posible que el robot de limpieza detecte determinados muebles, como una cuna, y de pronto comiences a recibir anuncios y promociones de ropa para bebés.

 

¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de adquirir uno de estos dispositivos?
Lo primero que hay que considerar a la hora de comprar uno de estos dispositivos son las condiciones de privacidad y seguridad.

  1. Servidor: Es muy importante que comprobemos con el fabricante si, efectivamente, se nos está dando un servicio a través de la nube o a través de un servidor particular al que se envían todos los datos recopilados por el dispositivo.

  2. Uso de los datos: Otro aspecto fundamental es informarnos sobre qué datos son los que se van a compartir con el servidor, además del uso que se les dará.

  3. Tipo de servicio: También conviene que preguntemos qué servicios, de los que ofrece el dispositivo, necesitan conexión con el exterior.

  4. Seguridad: Otro punto a tener en cuenta, es que la conexión desde la nube puede ser un punto de entrada a nuestro hogar y por lo tanto un riesgo. Así, es interesante preguntar si los datos que van a compartirse estarán cifrados e informarnos sobre las medidas empleadas para garantizar su protección.