El gobierno belga ha desbloqueado el acuerdo comercial de la UE con Canadá, conocido como CETA. Lo acaba de anunciar el primer ministro belga, Charles Michel. Ha asegurado que los líderes regionales y el Ejecutivo federal han pactado un nuevo texto que permite disipar las preocupaciones acerca de las importaciones agrícolas y sobre los tribunales de arbitraje que dirimen los contenciosos entre las empresas y los Estados.

Ahora serán de nuevo los parlamentos regionales los que tendrán que dar el visto bueno entre el viernes y el sábado. Y después los socios de la UE tendrán que dar el visto bueno a las exigencias de los belgas.

Valonia llevaba varios días negándose a firma pero finalmente lo ha hecho tras una larga noche de negociaciones.