Hace un par de semanas que dejamos de lado la COP26, la cumbre por el clima de Glasgow que cerró sin acuerdos y mirando a Egipto 2022. Sin pactos por la defensa del planeta y con mensajes sin fondo, el Banco Central Europeo alerta este martes: ningún banco de la Unión cuenta con estrategias para hacer frente al cambio climático.

¿Es verdad? ¿No tienen hojas de ruta sobre la mesa las principales entidades del viejo continente?

Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:

¿Es verdad que, como dice el BCE, la banca "no hace nada" por el clima?

El supervisor ha analizado 112 instituciones que gestionan hasta 24 billones en activos y concluye que, a pesar de los compromisos, las actuaciones son todavía limitadas

Lo decía el premier británico, Boris Johnson, en Glasgow hace unas semanas queda un minuto para la medianoche, hay que actuar ya. Mientras que el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres avisaba: "estamos cavando nuestra propia tumba y decía, estamos utilizando nuestro planeta como un váter".

De momento, la inactividad por el clima está ahí. Las temperaturas globales anuales suben, el nivel de los mares aumenta y la Tierra desaparece.

De momento, lo que sabemos: el dinero también contamina. No es nada nuevo. Ya se sabía.

Este lunes, el Banco Central Europeo, da la razón a parte de estos argumentos. Si bien, alrededor de la mitad de las 112 instituciones (con activos combinados que rondan los 24 billones de euros) y sobre las que el supervisor ha puesto la lupa en los últimos meses dicen estar ya preparando “planes de contingencia” para luchar contra el cambio climático, de momento, la trayectoria que llevan deja mucho que desear, acorde al informe publicado en el blog del BCE por Frank Elderson, miembro de la junta directiva del supervisor.

Se advierte en el informe de que solo un tercio de los bancos tiene planes establecidos que son al menos ampliamente adecuados, y la mitad no habrá completado la implementación de sus planes para fines de 2022.

La situación "preocupa"...

Pero… ¿es verdad que ningún banco de la zona euro, como denuncia el BCE, cuenta con una estrategia contra el cambio climático?

A ver, el organismo que presidente Christine Lagarde señala que la mitad de los bancos evaluados espera que los riesgos climáticos y ambientales tengan un impacto material en su perfil de riesgo en los próximos tres a cinco años, siendo los riesgos crediticio, operativo y del modelo de negocio los más afectados.

Pero la preocupación por lo verde está ahí. De hecho, no sabemos si más por imagen que por convencimiento, todas las entidades quieren ser “la primera”.

De momento, en Glasgow todas las entidades se han comprometido a invertir 130 billones de dólares (o 112 billones de euros) en las próximas tres décadas a esto mismo, pasar de una concepción a la contraria.

Una decisión que desde las asociaciones ecologistas ponen en liza. Dicen que muchos de los banco adheridos a la propuesta rechazaron el mes pasado una hoja de ruta diseñada por la Agencia Internacional de la Energía para detener la financiación de nuevos proyectos de gas, petróleo y carbón.

Los gigantes: BBVA y Santander

Aquí en España, las dos mayores entidades del país, BBVA y Santander tienen planes sobre la mesa. La vasca va a canalizar 200.000 millones de euros entre 2018 y 2025 en financiación sostenible, doblando el importe que se marcó como objetivo hace tres años. A cierre de septiembre, habían movilizado 75.000 millones.

El informe del BCE llega apenas unos meses antes de que el BCE publique en el primer trimestre de 2022 sus hallazgos sobre la incidencia de las actividades de los bancos en el planeta. El mensaje de hoy, en cualquier caso, es claro: “hay que actuar ya”.