El FC Barcelona se ha apuntado un nuevo trofeo a sus vitrinas financieras. La facturación del conjunto catalán alcanzó los 914 millones de euros al cierre provisional del ejercicio de 2017-2018. Un dato que casi alcanza las cuatro cifras, pero cuyo beneficio neto solo alcanza los 13 millones de euros.

Si los ingresos han crecido, los gastos también aumentaron un 2% hasta los 882 millones de euros, muy lejos de la previsión de octubre cuando el equipo de Bartomeu lo cifró en 865 millones.

Esa partida tenía dos patas diferenciadas, 479 millones destinados a salarios y unos 109 a la amortización por la compra de derechos federativos. De hecho, el club no ha informado si las menores ganancias se deben a los fichajes de Coutinho y Dembelé, traspasos que superaron los 100 millones de euros.

En cuanto a los ingresos, el FC Barcelona tampoco ha desvelado si la mejora se debe a la inclusión de plusvalías por traspasos no previstas o si efectivamente se ha facturado más por el negocio ordinario.