Silvio Berlusconi se ha dedicido y deja de lado Alemania para lanzarse de lleno al mercado español. El grupo propiedad de su familia Media For Europe (MFE), la antigua Mediaset y controlada por el imperio del exprimer ministro italiano, lanza una oferta pública de adquisición (opa) voluntaria de acciones por su filial Mediaset España.

La oferta, según el pliego publicado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se dirige a la totalidad de las acciones que componen el capital social de Mediaset España, de la que la matriz italiana posee el 55,69 % de las participaciones.

En concreto, MFE busca el 44,31 % del capital social de la española ofreciendo 1,86 euros por acción en efectivo y 4,5 en acciones ordinarias.

La operación era esperada por el mercado y se ha materializado al cierre de la sesión de este martes después que durante toda la jornada, los títulos de Media For Europe hayan estado suspendidos de cotización en la Bolsa de Milán mientras que ayer en España y ante los rumores sobre esa posible opa fue la CNMV la que canceló temporalmente la cotización de Mediaset España.

El consejero delegado de MFE, Pier Silvio Berlusconi, hijo del magnate y ex primer ministro, asegura en un comunicado que "la idea es potenciar las áreas geográficas" donde MFE "ya es líder", Italia y España, "siempre basó la creación de un conglomerado europeo" de televisión.

Ahora, tras las disputas con el grupo francés Vivendi, zanjadas el año pasado, MFE quiere iniciar su "primera racionalización económico y financiera" con esta operación que "aumentará los recursos y la escala" para su desarrollo internacional, se lee en la nota.

No abandona Alemania

Paralelamente la firma no quiere abandonar por completo Alemania y confirma que "seguirá invirtiendo" en la compañía ProSiebenSat.1 con la idea de "fortalecer los medios europeos" y a su vez "ofreciendo nuevas oportunidades de crecimiento a los inversores" de Mediaset España.

"En un momento como este, toda actividad que refuerce el proyecto europeo y su identidad en el proceso de globalización en curso es una buena noticia para nuestro futuro", sentencia Berlusconi.