Société Generale supera las previsiones del mercado en el cuarto trimestre del año, gracias al impulso sorpresa de las ganancias en la banca de consumo en Francia. Además, la entidad anuncia planes para realizar oferta pública inicial de su negocio de alquiler de automóviles, como parte de sus esfuerzos para diversificarse más allá de la banca minorista, afectada por el entorno de bajos tipos de interés.

El beneficio neto alcanza los 390 millones de euros en el último trimestre de 2016, una caída del 40,5% respecto al año anterior, pero por encima de los 315 millones estimados por el consenso de analistas. Los ingresos crecen un 1%, hasta 6.130 millones. Estas cuentas incluyen el coste de la venta de su unidad croata, que pesan sobre los resultados, con una pérdida de 235 millones por la venta de OTP Bank a Splitska Banka.

La entidad, igual que el resto de bancos europeos, lucha por obtener beneficios en un momento de tipos de interés en mínimos récord, una economía débil y mayores exigencias regulatorias y de capital, además de la transformación digital que afecta directamente a su modelo de negocio. En el último trimestre de 2016 el banco francés se beneficia de menores previsiones por préstamos incobrables y mejores resultados en Rusia y África. También impulsa sus cuentas el negocio de trading y banca comercial y de inversión, que sube un 51%, a 432 millones de euros.

Tras presentar estos resultados, el segundo mayor banco cotizando de Francia informa de que subirá su dividendo un 10% a 2,20 euros por acción frente a los 2 euros del año anterior.. Las acciones de Société Generale han caído un 6,8% en los últimos tres días, dejando la valoración de la compañía en 34.500 millones de euros.