El presidente del Starbucks, Howard Schultz, dejará la administración de la mayor cadena de cafeterías del mundo a partir del 26 de junio. Su marcha alimenta las especulaciones sobre si el empresario de tendencia liberal lanzará una candidatura a la presidencia de Estados Unidos.

Durante cuatro décadas, Schultz ha convertido a Starbucks en una de las marcas más poderosas del mundo. Bajo su liderazgo, la cadena de cafeterías con sede en Seattle ha pasado de tener 11 locales a más de 28.000 en 77 países.

Schultz, de 64 años, asumió la presidencia el año pasado y entregó el cargo de presidente ejecutivo a Kevin Johnson, en momentos en que el crecimiento de Starbucks en el mercado estadounidense comenzaba a mostrar señales de enfriamiento. Esta tendencia no ha desaparecido y algunos analistas e inversores han comenzado a presionar a la compañía para que modere las aperturas de nuevas tiendas en Estados Unidos, donde posee más de 14.000 locales.

Esta misma semana, al ser preguntado en una entrevista sobre la campaña presidencial en un artículo del New York Times, dijo: "Yo pretendo pensar en diversas opciones, y eso podría incluir el servicio público. Pero estoy lejos de tomar una decisión sobre el futuro".

Las acciones de Starbucks cerraron anoche con un alza de un 0,28 por ciento a 57,07 dólares en la sesión regular del lunes, pero cayeron un 1 por ciento a 56,50 en las operaciones posteriores al cierre.