Nokia, la empresa finlandesa que comenzó su andadura fabricando pasta de papel en el siglo XIX, cumple en 2026 cien años de presencia en España. Un siglo durante el cual la compañía ha sabido adaptarse a múltiples disrupciones tecnológicas, reinventándose constantemente para mantenerse relevante en un sector tan dinámico como el tecnológico.
Ignacio Gallego, director general de Nokia España, recuerda que la compañía llegó a nuestro país en 1926 para contribuir al despliegue de las primeras redes de telefonía de la mano de Telefónica.
El director general de Nokia España, Ignacio Gallego, explica cómo la compañía centenaria se reinventa ante el superciclo de la inteligencia artificial.
"Nokia, lo que hoy es Nokia, es el resultado de consolidación de la industria de telecomunicaciones, en gran medida de Occidente", explica Gallego, señalando que la empresa actual ha incorporado a compañías que fueron punteras en su momento como Alcatel, Luzen Technologies, Nortel Networks o Teletra.
El iPhone como punto de inflexión
Cuando se le pregunta por el momento más complicado en la historia de la compañía, Gallego lo tiene claro: "La aparición del iPhone". Ese dispositivo supuso una disrupción en el mercado que obligó a Nokia a reinventarse.
"El iPhone fue una disrupción en el mercado que nos obligó a reinventarnos como compañía y, afortunadamente, hoy estamos felices de a dónde hemos llegado desde entonces", afirma el directivo.
Esta capacidad de transformación y adaptación es precisamente lo que define la esencia de Nokia, según explica su director general.
"La innovación es, yo diría, que el elemento clave en nuestra identidad como compañía", señala Gallego, quien destaca los logros de los Bell Labs, institución perteneciente a Nokia responsable de inventos tan relevantes como el transistor, el rayo láser o la tecnología básica para las pantallas táctiles.
Preparando las redes para el superciclo de la IA
Actualmente, Nokia se enfrenta a un nuevo momento disruptivo: el auge de la inteligencia artificial. "Estamos convencidos de que, efectivamente, estamos ya viviendo, no es futuro sino que es presente, un superciclo de la inteligencia artificial", explica Gallego, quien asegura que, con o sin burbuja, la IA va a condicionar la evolución del sector.
El problema es que las redes actuales no están preparadas para este cambio de paradigma. Gallego señala que casi el 50% del tráfico de ChatGPT o más del 60% del tráfico de Gemini procede de dispositivos móviles, lo que supone un desafío para las redes 5G actuales.
"La inteligencia artificial y todos los casos de uso que va a traer asociados está cambiando el perfil de uso de las redes", explica el directivo, destacando que mientras hasta ahora las redes móviles estaban diseñadas principalmente para descargar información (downlink), la IA invierte esta relación, poniendo un estrés en las infraestructuras existentes.
Alianzas estratégicas para el futuro
Para hacer frente a estos desafíos, Nokia ha reorganizado su estructura, unificando sus cuatro divisiones en dos. Por un lado, la división de infraestructura de red, centrada en los centros de datos, y por otro, la división de infraestructura móvil, que integra las redes de radio, software, núcleo de redes y la gestión de propiedad intelectual.
Además, la compañía ha llegado a un acuerdo estratégico con Nvidia, que ha decidido invertir mil millones de dólares en Nokia para desarrollar capacidades que permitan adaptar las redes al nuevo escenario dominado por la IA.
"Este asunto, históricamente, tenemos una experiencia hace 25 años con la crisis de las punto com, donde vivimos un frenesí parecido con el mundo de Internet", reflexiona Gallego sobre el posible fenómeno burbuja en torno a la IA. Sin embargo, tiene claro que "la IA está aquí para quedarse" y que, aunque algunas empresas se quedarán por el camino, otras tendrán éxito.
España sigue siendo un mercado estratégico para Nokia, con cuatro centros de innovación en nuestro país que son referencia para la compañía a nivel global.
Gallego destaca que España se está posicionando en el tablero internacional como uno de los puntos de referencia para el despliegue de centros de datos, vinculados también a la creciente preocupación por la seguridad en la gestión de la información y la soberanía estratégica a nivel europeo.
Tras un siglo de historia en España, Nokia mira al futuro con la misma capacidad de adaptación que la ha caracterizado desde sus inicios, preparándose para liderar la transformación de las redes en la era de la inteligencia artificial.
