OHL cierra 2016 con unas pérdidas de 432,3 millones de euros por proyectos deficitarios y un impacto cambiario adverso en sus cuentas, frente al beneficio neto de 55,6 millones de euros de 2015. Sin estos factores la constructora habría ganado 247,5 millones de euros, es decir, cuadruplicaría el resultado obtenido hace un año.

Los resultados recogen también una serie de desinversiones incluyendo participaciones en Abertis y en proyectos como los hoteles de Nayakoba o Canalejas en Madrid, en un ejercicio marcado por el saneamiento de sus cuentas.

En la nota a la CNMV, OHL informa de que sus ventas bajan el año pasado un 11,6%, a 3.863 millones de euros, y el Ebitda desciende un 76,9% hasta los 223 millones de euros, afectado por un negativo efecto divisas en México y el reconocimiento de pérdidas en los proyectos no rentables.

La deuda neta consolidada se reduce a 2.911 millones de euros, de los cuales 748 millones corresponden a deuda neta con recurso.

OHL reconoce que 2016 ha sido "un ejercicio de malos resultados" y destaca el comportamiento de la división de Concesiones, donde las ventas y el Ebitda por peajes, a tipo de cambio constante y sin efecto del cambio de método de consolidación de Metro Ligero Oeste, crecen un 11,7% y un 20,5% respectivamente. Destacan especialmente las concesiones en México, que presentan crecimientos en moneda local del 14,7% y del 14,8%, respectivamente.

Por otro lado, OHL indica que ha logrado el respaldo de sus principales bancos acreedores; Caixabank, Banco Sabadell, Bankia, Santander, Popular, Société Générale y Crédit Agricole. Estas entidades "han decidido mantener sus posiciones y comprometer un paquete de financiación adicional por importe total de 747 millones de euros: 190 millones de línea de crédito, 465 millones de línea de avales y 92 millones de línea de confirming".