Societe General gana menos de lo esperado en el cuarto trimestre del año, tras reservar 400 millones de euros adicionales para cubrir costes de litigios. El segundo mayor banco francés se encuentra inmerso en un proceso de reducción de costes en las redes de venta al por menor y reestructuración de las operaciones deficitarias en Rusia, en un intento de mejorar la rentabilidad.

En este contexto, la entidad mejora su beneficio neto en el último tramo del año hasta los 656 millones de euros, desde los 549 de un año antes. El beneficio del conjunto del ejercicio crece un 50%, a 4.000 millones de euros. El ROE del banco se eleva hasta el 7,9% desde el 5,3% del año anterior. Societe General propone un dividendo de 2 euros por acción.

Tras haber publicado los ingresos más altos desde 2010, el banco asegura que ahora está en buen camino después de deshacerse de 8.000 millones en activos en los últimos seis años.

Mientras muchos de sus rivales en el mercado reducen sus balances en banca corporativa e inversión, la compañía francesa dice centrarse en actividades atractivas dentro del nuevo entorno regulatorio. Aunque, como todos los bancos, lucha por lograr rentabilidad. Además, Societe General está desarrollando una investigación interna sobre transferencias hechas en dólares realizadas a entidades radicadas en países sujetos a sanciones de Estados Unidos.