Vender casas a golpe de TikTok. Esta es la idea de Metrovacesa. Venderles su hogar en apenas 15 segundos. Enseñarles en lo que se tarda en rellenar un vaso de agua los principales detalles de sus promociones y fidelizar a los clientes. Y hacerlo además, con tokens.

¿Es posible? ¿Qué buscan desde Metrovacesa con esta “velocidad de venta”?

Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:

Tik Tok y tokens al crédito: el futuro de la (venta) de tu casa

Metrovacesa cambia el modelo de venta de inmuebles en nuestro país y deja sobre la mesa las piedras para la construcción de un nuevo mundo

Quince segundos nos pueden parecer muy pocos. Lo son. Para muchas cosas y para vender una casa nos puede parecer nada.

En la teoría podría serlo, pero la propuesta de Metrovacesa (un proyecto que han presentado en exclusiva en el programa Inversión Inmobiliaria, en la antena de Capital Radio) va más allá. De la mano del Sandbox financiero, por lo tanto, cuenta con el apoyo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, (CNMV) la promotora pone en el mercado una idea que pocos se la pudieran imaginar: Tokenizar el crédito del proyecto residencial Málaga Towers.

Y me dirán ustedes. Pues muy bien, pero ¿esto qué es? Yo, Metrovacesa me uno con la protech Dacasasas que emite un crédito y el cliente puede invertir en la financiación de la comercialización de ese proyecto con una rentabilidad del 12%. Y para hacer todo ello la promotora se apoya en las startups: Datacasas que es la proptech que pone la tecnología y en RealFund, que es la primera startup en España que posibilita la tokenización de activos vinculados a propiedades inmobiliarias con la supervisión de la CNMV, es decir se encarga de la parte jurídica del proyecto.

¿El truco? Que este dinero no es fiduciario, es dinero digital. Se tokeniza parte del crédito para financiar la comercializaión del proyecto. Es decir, se le da un valor digital.

¿Por qué invertir en estos proyectos?

Por las rentabilidades. Mínimas del 12% al año.

Todo esto está muy bien. Pero… ¿qué beneficios nos puede dar la tokenización? Pues que si queremos, por cualquier cosa (nos quedamos sin fondos por cualquier problema o, simplemente, hemos decidido que no nos convence el proyecto) podemos retirar nuestro dinero en cualquier momento.

¿Qué se nos devuelve? El dinero que “metimos” en su momento, íntegramente, respecto a la parte proporcional del interés que hayamos tenido.

Esta iniciativa se hace con blockchain que lleva ya en el mercado desde 2019, dos años. Metrovacesa fue la primera promotora en usar blockchain para proporciona a los clientes información sobre sus promociones con todas las garantías de seguridad y transparencia. Recientemente la inmobiliaria ha dado un paso más con la integración de BIM (Building Information Modeling) con blockchain para certificar los documentos e hitos relativos al proceso de promoción por los diferentes actores (arquitectos, constructoras, etc), con un "sello de tiempo" asignado en blockchain, que permite conocer con total seguridad el momento y la versión del documento que se certifica. Y es ahora cuando Metrovacesa se sitúa como punta de lanza con este proyecto de Málaga Towers porque aunque la inmobiliaria ya utilizaba la digitalización en los procesos constructivos y de comercialización, ahora le da una vuelta de tuerca más al utilizar blockchain para la financión de la parte de comercialización de Málata Towers.

Tokens para pagar

Y luego está el tema de los tokens que, en realidad, no es más que una nuevo término para hablar de una unidad de valor emitida por una entidad privada. El más famoso de los tokens es el Ethereum. Volátil como el bitcoin y sujeto a los vaivenes del mercado. Por cierto, que dicen ahora que las cripto suben al calor de la inflación.

Pero en este caso, la historia cambia porque los tokens no estarán ligados al Ethereum. No serán, por lo tanto, “movidas” por el mercado sino que estarán apoyados sobre las stablecoins: criptomonedas estables como el Tether o DAI.

Estos productos se asocian al valor de una moneda fiduciaria como es el dólar o el euro, a bienes materiales como el oro o los inmuebles, o a otra criptomoneda. Luego es como todo, pendiente de los vaivenes del mercado, pero no del antojo de los inversores.

Este proyecto les habla de la tokenización del crédito pero también está la tokenización de activos inmobiliarios que determina la simultánea existencia, por un lado, del activo físico y, por otro lado, de su representación digital, el token.

Es imprescindible asegurar que el token está inseparablemente unido al activo inmobiliario y, consecuentemente, al derecho real inmobiliario existente sobre el mismo. Es decir el token (que no se ve, no se toca) está muy bien. Pero siempre tiene que contar con un activo detrás porque si no es, con las seis letras de la palabra, poco más que una estafa.

En alemán, en francés, en castellano y también en otras lenguas como el neerlandés. Todas ellas entran a formar parte de este juego que pasa ahora por ser “internacional” y, sobre todo, “moderno”.

Vender a ritmo de Tik Tok

Y aquí hablamos, después de todo este lío, de otra de las perchas con las que les contábamos hoy. Tik Tok…

La red social de los videos cortos musicales (este es el último de los éxitos que triunfa) para jóvenes le sirve de plataforma y a Metrovacesa para lanzar sus promociones. En 15 segundos te venden una casa, atraen clientes y los fidelizan, todo esto. Quince segundos pueden parecer muy pocos para vender una casa, pero la inmobiliaria confía en llegar al público adecuado.

"La música y el ritmo nos ayudan a recordar y a emocionarnos Siempre se ha dicho. Con las casas, uno de los elementos que más llegan al “corazón” del consumidor (puede que sea por la cuenta que tocan), pasa igual. Ya saben. El futuro: criptomonedas y Tik Tok, una alianza “de otra galaxia”.