Tras haber investigado e interrogado durante esta semana a los representantes jurídicos de ambas compañías, el juez de la Audiencia nacional, Manuel García Castellón, ha emitido un auto en el que desimputa del "caso Villarejo" tanto a CaixaBank y su expresidente, Isidro Fainé, como a la petrolera Repsol y a su actual presidente, Antonio Brufau.

El magistrado descarta que ambos mandatarios participaran en el encargo a Cenyt, la empresa vinculada al ex policía Villarejo, para investigar el intento de toma de control sobre la petrolera por parte de Sacyr y Pemex. De este modo, les exculpa ante la falta de indicios.

Tanto Brufau como Fainé fueron imputados en el marco del denominado proyecto “Wine” entre los años 2011 y 2012. Un caso que tiene que ver con los encargos a Cenyt para investigar a Luis del Rivero, presidente de Sacyr, y sus contactos con la petrolera mexicana Pemex con la intención de hacerse con el control de Repsol.

Una vez que ha escuchado las declaraciones de los hasta ahora imputados, el juez entiende que –pese a que hubo delito previo- no existen pruebas que impliquen ni a Fainé ni a Brufau como autores, encubridores o cómplices en estos hechos.

Desimputación de las compañías

Por lo que respecta a la investigación de Repsol y CaixaBank, García Castellón señala que "no puede exigirse responsabilidad a la persona jurídica por la mera comisión por alguno de sus directivos o empleados de alguno de los delitos previstos en el Código Penal".

Además, el juez encargado del caso ha admitido que "no hay razones que justifiquen seguir adelante en la causa con alguna persona, ya sea física o jurídica".

El magistrado de la Audiencia Nacional aprueba, por tanto, los argumentos de CaixaBank , quien defendía que no había incurrido en ningún delito de cohecho ni revelación de secretos. La entidad defendió en la sala que: "comprobó, con la debida diligencia, a quién iba a contratar, en cumplimiento de todos los controles sobre conocimiento y legalidad del proveedor de servicios Cenyt".

Respecto a la petrolera Repsol, el juez señala que "tenía un sistema de cumplimiento dirigido a fomentar una verdadera cultura empresarial del cumplimiento normativo en general".