Xi Jinping se ha convertido en el líder más poderoso de China desde Mao Zedong, con la inclusión de su pensamiento político en la Constitución del país y la formación de un Comité Permanente a su favor donde no hay un sucesor claro. Su probable apuesta por mantenerse en el poder hasta 2027 o, incluso, más tiempo es reflejo de su política interior y exterior. El Presidente del país y secretario del Partido, entre otros cargos, apuesta por China como líder de la escena internacional y defiende en el XIX Congreso del Partido Comunista una nueva era de poder e influencia económica y política.

A través del Partido, el líder chino controla un país de 1.300 millones de habitantes, un ejército de 1,3 millones de efectivos y una economía de 12 billones de dólares, que tras registrar crecimientos frenéticos durante las últimas décadas está en pleno proceso de cambio de su modelo económico. Los datos de crecimiento y desarrollo económico entierran las críticas iniciales sobre este proceso de transición y se hace cada vez más evidente que China no se desintegra y avanza pese a la existencia de problemas internos.

El objetivo de Xi es convertir a China en una potencia económica y pilar básico del crecimiento mundial para 2050, pero ¿y si ya lo es? Aunque tal vez no se le vea así desde el punto de vista social o político, el gigante asiático está ya a la cabeza en partidas como el PIB o las exportaciones y saca partido de la situación geopolítica actual. China y Xi Jiping son valores estables frente al cambio de rumbo marcado por Donald Trump y su America First o frente a una Unión Europea que resiste pero se tambalea entre el brexit y los nacionalismos.

El XIX Congreso del Partido Comunista Chino apuesta por un control aún mayor de la producción y el modelo económico, pero a la ecuación de crecimiento se suman nuevos elementos de calidad, consumo, innovación, inversión, cuidado de los recursos naturales y capital humano. Entre los retos pendientes llama la atención su abultada deuda interna, que podría lastrar la lucha por el reparto de la riqueza, ya que son las familias chinas los principales acreedores de las empresas.

Mientras la geopolítica pasa de este a oeste China está en cabeza de carrera en la competición por el liderazgo mundial y Xi Jinping renueva mandato para quedarse.

'Entre líneas' se embarca en un viaje hacia China con la compañía de Alicia García Herrero, economista jefe para Asia-Pacífico de Natixis; Ignacio García Sánchez, capitán de navío y analista del Instituto de Estudios Estratégicos; Joaquín Beltrán Antolín, profesor de Estudios de Asia Oriental en la Universidad Autónoma de Barcelona y director de la Biblioteca de China Contemporánea de Edicions Bellaterra; y Josep Maria Coll, doctor y profesor de EADA Business School.