El presidente de la Federación Madrileña de Pádel y miembro de la Junta Directiva de la Española, José Luis Amoroto, ha respondido duramente a las ocho territoriales que acusaban a la estatal de haber apoyado el circuito promovido por Fabrice Pastor y, por tanto, la pérdida de unas inversiones, que según ellos estaban comprometidas. También de estar en quiebra con el consiguiente deterioro de la imagen.

José Luis Amoroto, “Pepelu”, ha respondido a estas tres acusaciones en “Esto es Pádel” y, según él, desmontando cada una de ellas. Señala que la carta enviada por estas ocho federaciones contiene multitud de falsedades.

En primer lugar dice que es "mentira que el presidente de la Federación Española, Alfredo Garbisu, haya apoyado el circuito IPT", añade que motivaciones han movido a esa afirmación porque nunca se han pronunciado a favor de alguno de los circuitos. También ha señalado que es “incierto que hubiera firmado algún acuerdo de patrocinio con Fabrice Pastor, solo hubo una primera reunión de aproximación. Respecto a la falta de igualdad entre hombres y mujeres que también apunta el comunicado, Amoroto afirma “en la española siempre cobran los mismos premios cuando en estas federaciones no se hace y tienen muchas diferencias”.

Y sobre la acusación de que la Federación está quebrada reitera que “la carta está llena de falsedades y mentiras”. Recuerda que el patrimonio neto actual se debe a un pago que tenían que haber hecho las federaciones ha pasado así a la Federación Española.

Aquí tienes el programa íntegro con la participación en la tertulia El Foro de "Esto es Pádel" de Iván Hernández de "Contrapared" y Nacho García de "Padelazo". Como siempre para concluir la columna de "El Mangazo Tolili".
Explica también Amoroto que en febrero, Garbisu decidió organizar un Consejo de Presidentes Consultivo, con el fin de lograr el máximo consenso entre todos los responsables de las Autonómicas. Se aprobaron una serie de medidas, incluso el Presidente de Valencia pidió que se pagaran unas cuotas mayores para que la FEP tuviese una bolsa ante posibles contingencias y, horas después, ese mismo Presidente estaba tumbando la propuesta.

Un presidente, Alfonso Monferrer, imputado por delitos en la Audiencia Nacional que ascienden a más de 900 millones de euros, y Pere Pons, Presidente de la Federación Catalana, “ que era amigo mío y a quien en su día destituimos de la FEP y pedimos su salida de la FIP por su apoyo al proceso de independencia de Cataluña”.