El Banco de España destaca la contribución del consumo de los hogares en el crecimiento del 1,4 % del PIB en 2014, que ha avanzado el INE, y afirma que esta expansión habría continuado actualmente.


El boletín económico del Banco de España difundido hoy señala que el incremento del gasto de los hogares en la etapa más reciente se sustenta por la evolución "favorable" del mercado de trabajo y la "progresiva mejora" de las condiciones financieras.

El organismo supervisor indica que se ha producido un "notable" dinamismo de las matriculaciones de los vehículos particulares y añade el avance de las ventas al por menor del cuarto trimestre del año pasado. También destaca que la "modesta mejora" de la inversión residencial también habría ayudado al crecimiento de la economía española así como la aceleración de las exportaciones de bienes.

El Banco de España señala la mejora de los condicionantes de naturaleza financiera como la mejora de los tipos de interés de los nuevos préstamos para la adquisición de vivienda y los destinados a consumo, lo que ha llevado a una reducción del coste de financiación de las familias y ha "favorecido el avance de los flujos de nuevas operaciones".

En la misma línea, también recuerda que en diciembre han descendido los costes de financiación de las sociedades no financieras, al tiempo que ha continuado la recuperación de la actividad constructora.


Por otra parte, los servicios de estudios auguran que la evolución económica de la zona del euro continuará con un "tono más positivo" que en los meses precedentes basándose en la mejoría de la confianza de los consumidores y de las ventas al por menor dentro de la eurozona.

En este sentido, el Banco de España dedica un capítulo del boletín a la evolución del empleo y el paro en 2014 y asegura que esta variable confirmó en el cuarto trimestre el perfil de "intensa recuperación" de trimestres precedentes. Además, avanza que los datos disponibles de enero apuntan al mantenimiento de este dinamismo.


Pese a este optimismo, pone de manifiesto las dificultades existentes para que los colectivos que han acumulado un largo periodo en el desempleo desde el inicio de la crisis y con un nivel de formación reducido participen en la mejora del mercado laboral.


 

Foto: Antonio Tajuelo