La reunión de ministros de Exteriores del G7 y de la Unión Europea en Toronto, Canadá, tiene lugar en un contexto de creciente "fragmentación" en la escena internacional. Así lo describe Diego López Garrido, director de la Fundación Alternativas, quien señala que la cumbre abordará desafíos globales como Ucrania, el Ártico, Haití, minerales críticos y seguridad energética.
El encuentro de Toronto llega tras lo que López Garrido califica como un "casi fiasco" en la reunión previa de ministros de Energía y Medio Ambiente, quienes no lograron redactar un comunicado conjunto debido a las tensiones entre países.
El director de la Fundación Alternativas analiza las tensiones del G7 en Toronto y los desafíos de la política internacional.
¿Hay expectativas para acuerdos significativos?
"Esa es la intención que tiene, desde luego, la anfitriona, Anita Anand, la canciller de Canadá en Toronto", explica López Garrido, "pero es verdad que el ambiente de fragmentación existente ahora mismo en la geopolítica y geoeconómica internacional va a dificultar que haya eso que pretende la canciller canadiense, que es la de hacer un comunicado conjunto".
El experto señala que las relaciones entre Estados Unidos y Canadá "no son excesivamente maravillosas", recordando que "la primera decisión que tomó Donald Trump cuando fue elegido es que a ver si se podía anexionar a Canadá como el Estado 51 de los Estados Unidos".
La transición verde, fuera de la agenda
Un punto crítico en las discusiones es la aparente exclusión de los acuerdos para la transición verde de la agenda del G7, con Estados Unidos defendiendo su "dominación energética". Sin embargo, López Garrido señala que la celebración paralela de la COP 30 en Brasil "seguramente ayudará a tener actitudes más constructivas respecto del asunto de la transición energética y del medio ambiente".
El tema de los materiales críticos y tierras raras, dominados por China, también está en el centro del debate. "El no acuerdo sobre todo este asunto de transición energética y eso que yo decía sobre las tierras raras, los minerales críticos, todo eso lo que haría sería fortalecer más aún la posición de China", advierte el experto.
Incertidumbre en la política comercial estadounidense
Respecto a la normalización del comercio internacional tras las tensiones arancelarias, López Garrido considera que persisten dificultades importantes: "La política comercial estadounidense se caracteriza por la incertidumbre, por no saber cuál es la decisión, por ejemplo, de tarifas arancelarias que va a tomar cada día o cada ocurrencia de Donald Trump".
"Yo creo que nunca como ahora estamos viviendo un momento en las relaciones geopolíticas y geoestratégicas del mundo, la incertidumbre que yo decía anteriormente, que está condicionada por las decisiones fundamentalmente del líder en ese G7, que ha solido ser siempre Estados Unidos"
Fragmentación global y europea
López Garrido destaca que la fragmentación no es exclusiva del escenario global, sino que también se observa en el seno de la Unión Europea, como reflejan los informes Draghi y Letta. "No podemos decir que es un momento de gran unidad en los asuntos centrales, políticos y económicos", señala.
El experto menciona la preocupación de grandes empresas, tanto americanas como europeas, por una "regulación excesiva" en temas medioambientales que podría dañar su competitividad, lo que ha generado "todo un movimiento para conseguir que haya una mayor simplificación en las normas regulatorias" relacionadas con el medio ambiente.
Estas tensiones entre regulación ambiental y competitividad empresarial serán, sin duda, uno de los temas centrales en las reuniones de Toronto, en un contexto internacional marcado por la incertidumbre y la fragmentación política y económica.
