El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentará hoy lunes su esperado plan de infraestructuras, una iniciativa de 1,5 billones de dólares con la que cumplir su anunciada promesa electorales.

Aunque el proyecto depende en buena parte de que gobiernos estatales y locales, así como las empresas privadas aporten gran parte de la financiación. El plan del gobierno se centra en aportar 200.000 millones de dólares de dinero federal de fondos recaudados con impuestos locales y estatales para reparar infraestructuras como carreteras, autopistas, puertos y aeropuertos.

Trump ha culpado varias veces al “ruinoso” estado de las carreteras y autopistas del país de impedir que la economía estadounidense alcance todo su potencial.

Muchos en Washington creen que Trump debería haber comenzado su mandato hace un año con una iniciativa en este terreno que podría haber logrado apoyo bipartidista, o al menos colocar a los demócratas en una posición difícil por oponerse a una medida popular.

Y también recortar significativamente las regulaciones vigentes. El plan establece que una sola agencia será la que decida sobre la evaluación de un proyecto y dará el veredicto definitivo sobre su viabilidad, lo que podría tener un impacto negativo en el medioambiente ya que la Agencia de Medioambiente no podría dar su impresión.

Esa capacidad de evaluación independiente permitió a la EPA advertir al Gobierno del anterior presidente, Barack Obama, de los daños medioambientales que conllevaba la construcción del oleoducto Keystone XL para transportar unos 830.000 barriles diarios de crudo desde Alberta (Canadá) a distintos lugares de Estados Unidos.

Tras un largo proceso de deliberaciones, Obama decidió frenar la construcción del oleoducto, pero Trump revirtió la situación y lo aprobó en marzo de 2017.

El Ejecutivo también quiere invertir 50.000 millones de dólares en infraestructuras en zonas rurales y otros 20.000 millones en "programas transformadores", que plasmen una "visión de futuro" y sirvan para "construir las infraestructuras del próximo siglo".