Pedro Sánchez se ha olvidado de los coronabonos y del gran Plan Marshall para pasar a un plan aún más ambicioso. Este jueves en la próxima cumbre de la Unión Europea planteará un gran fondo europeo de hasta 1,5 billones de euros financiado con deuda perpetua, que se repartiría como transferencias (no deuda) entre los países más afectados por la crisis.

Este mecanismo permitiría a los países evitar caer en un mayor endeudamiento una vez que se termine la emergencia sanitaria y se proceda a reactivar la economía. "En vez de plantear un rescate complementario en forma de deuda, se plantea un sistema de transferencias directas o inversiones a países", explica Josep Lladós, profesor de Economía de la UOC.

Escucha la entrevista completa en el siguiente podcast.

Las trabas de Sánchez para aprobar su fondo europeo con deuda perpetua

Análisis con Josep Lladós, profesor de Economía de la UOC.

Las trabas que debe enfrentar España

La Unión Europea daría ese dinero a través de su presupuesto y lo transfiere a los países sin necesidad de reembolso. De todos modos, no se descarta que se tengan que pagar los intereses y en este escenario, la pregunta es cómo el Gobierno hará frente a ese pago.

Este fondo de recuperación podría entrar en vigor el próximo año. Sin embargo, hay diversas trabas y obstáculos que debe superar Sánchez para que se pueda aplicar. Por un lado, la pandemia llegó justo en medio del debate que mantiene la UE sobre el marco presupuestario 2021-2027 con puntos de partida donde no hay consenso. Antes de la emergencia sanitaria el objetivo era reducir el importe comunitario pero ahora se pretende expandir el presupuesto. "Esta sería la primera vía de dificultad", explica Lladós.

El siguiente obstáculo es cómo hará España para financiar el pago de intereses. Una de las ideas es que aquellos impuestos que ha puesto en marcha la UE para luchar contra el cambio climático o la tasa digital, se usen para pagar los intereses. Sin embargo, esta posibilidad se debería discutir en la próxima reunión.