Los drones submarinos están transformando las operaciones militares bajo el agua, cambian el panorama de la defensa submarina. En este escenario Arquimea nos explica las características y los usos prácticos de su dron submarino S-Wise. Jetxu Sánchez Loureiro, director comercial y de desarrollo de negocio del área de Defensa de Arquimea, nos acompaña en un nuevo episodio de Hablemos de Defensa y Seguridad para explicar el reto tecnológico de los drones que "vuelan" bajo el agua.
Hablemos de Defensa y Seguridad, una producción de IDS/Infodefensa Grupo Metalia en colaboración con TEDAE.
Los drones submarinos ya transforman las operaciones militares bajo el agua: el prototipo S-WISE de Arquimea (con dos metros de eslora) alcanza las 80 millas náuticas, tiene autonomía para 24 horas y puede transportar 30 kilos de carga útil
El futuro de la guerra comienza con robots
"En el combate actual, todos los primeros encuentros, todo el primer contacto se va a hacer entre robots o entre sistemas no tripulados, en todos los entornos", explica Sánchez Loureiro, citando al general de la división de planes del Ejército de Tierra. Esta realidad ha impulsado a Arquimea a desarrollar sistemas autónomos para entornos submarinos.
El S-Wise, prototipo estrella de la compañía, es un dron submarino de apenas dos metros de eslora que puede operar de manera autónoma bajo el agua. Su diseño le permite "volar" bajo el agua gracias a un sistema de alas que facilitan su movimiento, convirtiéndolo en un vehículo extremadamente ágil y difícil de detectar.
Capacidades técnicas del S-Wise
Este pequeño submarino no tripulado tiene 80 millas náuticas de alcance (aproximadamente 150 kilómetros), 24 horas de autonomía sin necesidad de recarga y una capacidad para transportar 30 kilos de carga útil. Su reducido tamaño le proporciona una baja firma acústica, lo que dificulta su detección por sistemas de vigilancia submarina convencionales. Esta característica lo hace ideal para misiones discretas en aguas potencialmente hostiles.
Múltiples aplicaciones militares
El S-Wise puede desempeñar diversas funciones según la carga que transporte. "Puede llevar a cabo muchos tipos de funciones, desde ir cargado con una carga explosiva y actuar como un torpedo dirigido, o llevar a cabo funciones de comunicaciones, de reconocimiento de zonas minadas, de limpieza de minas", detalla Sánchez Loureiro.
Esta versatilidad lo convierte en un activo valioso para operaciones anfibias, donde puede servir como avanzadilla en reconocimientos previos o como apoyo durante la operación principal, garantizando la seguridad del personal militar.
Una familia de drones submarinos
Arquimea está desarrollando otros dos modelos adicionales de drones submarinos de mayor tamaño: uno mediano, de 4,5 metros de eslora y 150 millas náuticas de alcance, y uno grande, de 9 metros y hasta 300 millas náuticas de autonomía.
Adicionalmente, la compañía ha desarrollado el Kronos, una lancha no tripulada de superficie que complementa las capacidades submarinas del S-Wise, orientada principalmente como munición merodeadora naval de superficie.
El desafío de la integración multientorno
Uno de los mayores retos técnicos que afronta Arquimea es la integración de sistemas no tripulados que operan en diferentes entornos. La empresa trabaja para que sus drones submarinos, de superficie y aéreos puedan comunicarse entre sí y con los sistemas de mando y control de las fuerzas armadas.
"Los ejércitos necesitan que estos sistemas hablen entre sí y estén integrados perfectamente con sus sistemas de mando y control", señala Sánchez Loureiro. En este sentido, Arquimea colabora con IRIS para sistemas aéreos, con Navantia para los navales y con Airbus para el lanzamiento desde plataformas como el helicóptero NH90 y el avión C295.
