Así lo considera la  agencia de calificación S&P. En su último informe sobre las entidades españolas, asegura que los bancos ya están entrando en una nueva etapa de fortalecimiento financiero y en la que van a cosechar los beneficios de la profunda reestructuración por la que ha pasado el sector.

S&P cree que es probable que los créditos problemáticos hayan tocado su punto máximo en 2014 y que el coste de crédito continúe disminuyendo este año y el que viene y se normalice a finales de 2016.

Los activos problemáticos y las necesidades de provisiones seguirán cayendo este año y el que viene y el programa de ajuste cuantitativo del Banco Central Europeo es otro factor que apoyará la rentabilidad del sistema y les ayudará a reducir los costes de financiación.

Pero también ve riesgos. Uno de ellos es que la economía española crezca a un ritmo inferior al estimado por la frágil recuperación de la zona euro y por una posible falta de compromiso con los objetivos fiscales en un año de elecciones autonómicas y generales.

Hoy también hemos conocido datos de morosidad de la banca en 2014. Ha bajado hasta el 12,5%, el nivel más bajo en quince meses.  Diciembre ha sido el cuarto mes consecutivo con caídas en la morosidad.