El beneficio operativo bruto de Gas Natural crece un 10,9% en los nueve primeros meses del año, por la contribución de la distribuidora de electricidad chilena CGE, que compró el año pasado. Sin embargo, el beneficio neto cae un 11,7%, a 1.094 millones, frente a unas previsiones de 1.100 millones. Se debe a la ausencia de plusvalías por desinversiones y los gastos vinculados a la adquisición de CGE. Sin éstas, las ganancias habrían aumentado un 3,8%.

El Ebitda del grupo energético asciende a 3.998 millones de euros, frente a los 3.984 millones que esperaba el consenso del mercado.

Por otro lado, Gas Natural indica que la aportación de la chilena CGE a su Ebitda consolidado hasta el 30 de septiembre es de 464 millones.