La energía eólica emplea actualmente a más de 35.000 personas en España y genera cinco veces más puestos de trabajo que las tecnologías energéticas convencionales. Las previsiones apuntan a que en 2030 el sector dará empleo a más de 68.000 profesionales, lo que convierte la búsqueda de talento en una misión clave para esta industria en crecimiento.
Se necesitan ingenieros, sí, pero también expertos en comunicación, especialistas en derecho, profesionales de marketing y gestores económicos.
En Ondas del Viento nos acompañan profesionales especializados en formación y búsqueda de talento para analizar cuáles son las necesidades reales de las empresas, cómo se están formando a los futuros trabajadores eólicos y, quizá, lo más importante dónde están las salidas profesionales.
Escucha el programa completo aquí:
Análisis con José Manuel Melendi, responsable de innovación, normalización y proyectos en la Asociación Empresarial Eólica; Roberto Cerrato, profesor de FP de Energías Renovables el IES Barajas y Esther Lucas, responsable de reclutamiento de Europa Sur de SPIE.
La brecha entre formación y necesidades del sector
José Manuel Melendi, responsable de Innovación, Normalización y Proyectos de la Asociación Empresarial Eólica, señala una paradoja actual: "Se necesitan muchos empleados en el sector eólico y hay alumnos en las formaciones existentes, pero con la nueva introducción de la formación dual se requieren más colaboraciones con empresas, y muchas veces estas colaboraciones no se llegan a ejecutar hasta el final".
Desde la perspectiva educativa, Roberto Cerrato, profesor de FP de Energías Renovables en el IES Barajas, explica que sus alumnos reciben "una formación básica de generación de energía eléctrica con energías renovables, con especial énfasis en fotovoltaica y en energía eólica".
Esther Lucas, responsable de reclutamiento de Europa Sur de SPIE, identifica tres capas adicionales a la formación básica que son necesarias: "Estamos hablando de una formación en seguridad, una segunda capa que es la formación en la tecnología específica, y una tercera que es la formación en el puesto en sí, el conocimiento del oficio".
La formación dual como solución
La nueva ley que entró en vigor el año pasado obliga a una mayor colaboración entre centros formativos y empresas. Roberto Cerrato destaca: "Nos obliga a que hasta un 25% de nuestra formación mínimo tiene que ser obligatoriamente en empresas".
Desde el sector empresarial, Esther Lucas señala que están haciendo esfuerzos para reducir la brecha: "Hemos creado nuestros propios centros de formación de GWO para agilizar el tema de las plazas. También tenemos centros en España, en Europa, en Italia, en América, y damos formación tanto presencial como online".
El reto de la movilidad geográfica
Uno de los principales desafíos identificados es la desconexión geográfica entre los centros de formación, ubicados generalmente en ciudades, y los puestos de trabajo, situados en entornos rurales donde se encuentran los parques eólicos.
Roberto Cerrato pone el ejemplo de la Comunidad de Madrid donde no hay parques eólicos. "Si nuestros alumnos tienen que desplazarse a un parque en Valencia, ¿quién corre con los gastos de manutención?"
Una posible solución sería establecer sistemas de becas o ayudas por parte de las empresas, similar al modelo que algunas compañías extranjeras ya implementan: "Tenemos el caso de empresas de Holanda que vienen aquí a por nuestros alumnos. Nos acogemos a las becas Erasmus y la empresa les habilita una vivienda compartida y les da una pequeña manutención".
Consejos para quienes quieren formarse en el sector eólico
Esther Lucas recomienda informarse bien sobre la realidad del trabajo: "Estamos hablando de energías renovables, todo muy novedoso, muy atractivo, muy bucólico, pero tienen que trabajar en altura, estar constantemente movilizándose, con condiciones climatológicas muy extremas. Tiene que ser una profesión vocacional".
José Manuel Melendi destaca la importancia de "creer en lo que haces" y recuerda que existen múltiples oportunidades: "No solo hay trabajos en altura y operación y mantenimiento, también hay muchos tipos de trabajo en el sector eólico: marketing, periodismo... hay muchas oportunidades".
Para concluir, Roberto Cerrato anima "a todos los hombres y mujeres que les llame la atención y que quieran colaborar en la transición energética" a encaminarse en estos estudios: "El tema de la energía y de las energías renovables en particular es amplísimo y necesitamos a todos que le echen ganas y que prueben".