Acaba de aprobar la administración Obama un programa marco de ciberseguridad.

Se trata de una nueva legislación, vía executive order, que ha dictado el Presidente que, aunque trata de seguridad, está enfocada principalmente a las empresas y a los ciudadanos.

Quiere desarrollar una guía de empresas para que mejoren su ciberseguridad, algo que ya anunció en su discurso sobre el estado de la Unión en 2013.

Pero ¿Cuáles son las implicaciones para las empresas y qué impacto tendrá en la economía?

Los responsables de la oficina económica de la Casa Blanca dicen que si se hacen las cosas bien las empresas y los negocios del mundo continuarán guardando información en compañías americanas, haciendo negocios con ellas y cerrando operaciones financieras con sus smartphones... Es una cuestión de seguridad nacional, pero se pretende que empresas como SONY PICTURES, JP MORGAN CHASE, TARGET, HOME DEPOT, el servicio postal de EEUU o APPLE que se han visto involucradas muy recientemente en ataques de esta naturaleza no sufran los perjuicios correspondientes.

La llamada Executive Order 13636, nace al hilo de la tendencia de los jóvenes a no tener miedo a lo digital, como dice el Presidente, y pretende la protección mediante la colaboración entre lo público y lo privado, compartiendo información y haciendo todo compatible con la protección de la privacidad y de los derechos y libertades.

Se crea una nueva agencia que depende del director de la Seguridad Nacional y se denomina Cyber Threat Intelligence Integration Center (CTTIC), que impulsará la identificación, priorización, dirección, gestión y/o comunicación de los riesgos en materia de ciberseguridad. Se trata de incorporar la ciberseguridad en su análisis de riesgos de forma habitual.

El objetivo es la búsqueda de consenso para lograr estándares voluntarios y las mejores prácticas en las empresas para construir el marco de ciberseguridad perseguido.

En uno de sus enfoques tenemos que destacar el programa voluntario para proteger las infraestructuras críticas (denominado C3 o C Cubed).

Se considera que Internet es uno de los mayores motores de crecimiento económico en USA y están en juego millones de puestos de trabajo.

De hecho uno de los involucrados son las tarjetas y la red de pago inteligente GSA que alcanza ya las 87,4 millones de transacciones por un importe de 26,4 billones de dólares al año.