Al igual que los medios de comunicación cuentan con corresponsales que informan sobre las noticias internacionales, también lo hacen los bancos. A la hora de hacer transacciones entre cuentas ubicadas en distintos países, las entidades financieras cuentan con corresponsales que garantizan que el dinero llegue a lugares donde el banco no llega.

En una nueva entrega de First Movers, Inés Muñoz Vidal y Raquel Guillot de Temenos y Raouf Soussi, Corporate Payment Strategy de BBVA, explican los distintos tipos de pago entre empresas.

Escucha la tertulia completa en el siguiente podcast.

Así funciona el sistema de corresponsalías de los bancos

A la hora de hacer transferencias pensamos en las que se producen entre particulares. Sin embargo, una parte muy importante de las mismas se produce por parte de grandes empresas. En esas transacciones se suelen mover grandes cantidades de dinero y como casi todas se realizan por internet, la ciberseguridad es un elemento cada vez más importante.

"La ciberseguridad no solo depende de la entidad financiera, hay dos partes igualmente importantes", señala Inés Muñoz Vidal, Digital Banking Specialist en Temenos. Y es que tanto la empresa como el banco deben asegurarse de que están protegidos a la hora de realizar transacciones.

Hoy en día una de las ventajas es que los usuarios pueden seguir el estado de las transacciones especialmente cuando son internacionales que no llegan de un día al otro. Pero para aquellos que quieren realizar transacciones inmediatas, existe el sistema de Pagos Swift. Este permite a las entidades adheridas al sistema a que "en cuestión de segundos un pago llegue al otro lado del mundo", señala Guillot.

La cadena de corresponsalías

¿Quién se encarga de que ese pago finalmente se liquide? Es decir, que los fondos de una cuenta bancaria lleguen a las de otra cuenta. Cuando se trata de cuentas dentro de un mismo territorio la operación es simple. Pero los bancos no tienen sedes ni cuentas en todo el mundo, como explica Soussi de BBVA.

En ese escenario entran los corresponsales. Por ejemplo, si un banco español tiene que traspasar fondos a una cuenta en Marruecos y no tiene una cuenta bancaria en ese país, debe utilizar a un corresponsal. Esa persona es la encargada de que el dinero llegue al destinatario final a través de una cuenta marroquí.

A veces en la cadena pueden participar dos corresponsales. Por ejemplo, si el banco español no tiene corresponsal en Marruecos, va a buscar a un corresponsal en otro país que sí cuente con una persona que tiene cuenta bancaria en el país africano. Es una cadena que resulta compleja de entender pero que es la única forma de que el dinero llegue a todo el mundo. "Es imposible que todos los bancos tengamos cuentas en todos los bancos del mundo, es muy costoso", concluye el Corporate Payment Strategy en BBVa.